Este lunes se cumple un año desde que fuera por el aire el plan de ADU Mediterráneo para comprar las parcelas de Mestalla y construir pisos en ellas. Destrozado el acuerdo por falta de garantías de la cooperativa, la pandemia y la falta de inversores ha bloqueado un tema capital para el futuro a corto, medio y largo plazo del Valencia CF. De hecho sigue siendo a día de hoy el punto de mayor fricción entre las instituciones y el club Valencianista que lleva ya doce años sin mover una piedra de su nuevo estadio.
Lo paradójico del asunto es que, un año después, el plan sigue siendo el mismo y no hay otro: Vender las parcelas de Mestalla y con ese dinero afrontar afrontar la construcción del campo, pero no hay inversor que entre al trapo, dice el club. Es por ello que quiere pedir una cita en abril con el Ayuntamiento para solicitar una revisión de la ATE que haga "viable económicamente"
Sandra Gómez ha sido tajante al respecto y no se cree que no haya inversores. De hecho, tras reunirse con Libertad VCF ya reconoció que sí han habido reuniones al respecto. "De la compra venta de parcelas sí hemos mantenido diversas reuniones con diversos grupos que puedan estar interesados en la compra de los terrenos (de Mestalla). Somos favorables de informar"
El caso es que, desde el Valencia CF se han vuelto a enviar tímidas señales para volver a acercar posturas y poder desbloquear una obra que lleva doce años parada. Precisamente esa inacción, y el hecho de que hasta la fecha Peter Lim no haya invertido ni un euro en la gestión de la venta de Mestalla y la finalización de las obras es la que hace que se ponga en cuarentena los movimientos.
Tras el intercambio de declaraciones y comunicaos de principios de marzo, el Valencia CF tiene intención ahora de rebajar posturas y establecer una nueva mesa de negociación para modificar una ATE que se considera no sólo que se va a incumplir, sino que tiene poca validez real con la situación económica actual y que, según piensan en las oficinas de Micer Mascó, hace inviable económicamente el proyecto de construir en Mestalla para los operadores que están interesados. El club necesita más metros cuadrados de edificabilidad comercial (ahora mismo hay 39.000 metros cuadrados concedidos en Mestalla que son los que pierde si se anula).
En ese sentido, al club se le abrió una ventana al escuchar a Joan Ribó cuando dijo que no quería "apretar el cuello" tendiéndoles la mano para buscar una solución al respecto. “El tema de la ATE es muy complicado jurídicamente, lo estamos estudiando y estamos buscado una solución. Es el mensaje que quiero enviar: busquemos una salida, una solución. Así no podemos continuar. Es imprescindible que no nos quedemos parados, es una situación inestable y hay que mover ficha. Es fundamental”, señaló y a eso se acoge el Valencia para rebajar la tensión y tratar de renegociar un año después de que la cooperativa saltara por los aires.
El tiempo pasa y el plan de Actuación Territorial Estratégica “Valencia Club de Fútbol” como desarrollo de la ATE (Actuación Territorial Estratégica) “Valencia Dinamiza” quedará incumplido el 15 de mayo.