Gayà quiere estar disponible para el partido del Valencia CF en LaLiga Santander este próximo domingo en Pamplona y hace todo lo posible para que así sea. Lleva varios días trabajando de forma incansable para dejar atrás las molestias en el sóleo de la pierna izquierda que le obligaron a abandonar la concentración de la selección española. El capitán ha ido respondiendo muy bien al aumento de cargas de trabajo y este viernes ha trabajado sobre el césped junto al resto de sus compañeros como uno más, algo que supone una gran noticia. De seguir así en el último entreno de la semana, fijado para la matinal del sábado en Mestalla, será José Bordalás el que deba decidir sobre la conveniencia o no de que juegue él o lo hagan alguna de las opciones que hay sobre la mesa para sustituirle.
Las sensaciones de Gayà están siendo muy positivas y las molestias casi han desaparecido por completo, algo que parecía poco probable tras los gestos de dolor que protagonizó el jugador el pasado domingo al notar un pinchazo en la zona afectada. El propio futbolista advirtió a sus compañeros dejando claro que "me he roto". Sin embargo, la sangré no llegó al río con Gayà, ni mucho menos. Afortunadamente para él y para el valencianismo, las pruebas médicas determinaron un simple edema sin lesión muscular de por medio. Tras el segundo y definitivo diagnóstico, se puso en marcha el contador con el punto de mira fijado en el domingo. Paulatinamente, Gayà ha ido mejorando cada día, con intensas sesiones de trabajo. Primero, en el gimnasio, posteriormente, sobre el césped y ya este viernes con todo el grupo y al mismo ritmo, lo que deja claro que se ha recuperado a tiempo y que es una opción real para jugar si el míster así lo estima oportuno.