Este jueves 7 de octubre se cumple exactamente un año del intento de espantada de Javi Gracia como técnico del Valencia CF. Aquel día, miércoles por la mañana, el técnico navarro sorprendió a todos al no personarse en el entrenamiento matinal, dejando a cargo de la sesión a sus asistentes. Él se dirigió junto a sus representantes a las oficinas del club para verse las caras con el presidente Anil Murthy. Esta situación fue propiciada por el cabreo y la frustración del entrenador al ver cómo el mercado de fichajes, que cerró un par de noches antes, sin un sólo fichaje a pesar de las constantes promesas estériles por parte del club valencianista. Javi Gracia puso su cargo a disposición del Valencia CF con la firme idea de poner punto y final a su trayectoria como entrenador blanquinegro. Apesadumbrado, tomó la iniciativa y lo hizo, sin embargo, el club se remitió a lo acordado según el contrato que obligaba a pagar una gran cantidad de dinero si se marchaba antes de lo previsto.
Ante esta situación y tras una jornada muy dura, el técnico navarro se vio obligado a recular. Al día siguiente, Javi Gracia emitió un comunicado para explicar la situación y dejar claro que se quedaba en el Valencia CF a pesar de todo. "Voy a hacer lo que realmente quiero", enfatizó el propio técnico para reforzar su postura.
Un año después de que Javi Gracia empezó a irse, el Valencia tiene seis refuerzos más, ha dado nueve bajas (entre traspasos y cedidos que no siguen)
Tras aquel episodio surrealista nada volvió a funcionar como debería. El equipo nunca llegó a arrancar y el propio técnico ofrecía sensaciones de hastío constantemente. En ocasiones su disgusto por estar donde le habían ninguneado se hacía más evidente que otras veces y el hecho de anteponer una guerra personal contra los gestores del club ante cualquier otra consideración le acabó pasando factura.
Un año después de que Javi Gracia empezó a irse, el Valencia tiene seis refuerzos más, ha dado nueve bajas (entre traspasos y cedidos que no siguen)
Creo que quedó demostrado que no era entrenador para el Valencia, y no voy a ir más allá por respeto, pero es obvio que a pesar de los no fichajes, la no gestión, y las ventas que hicieron, la plantilla era más que suficiente para bien dirigida, haber optado a estar en la pelea de la Europa League con Betis, R. Sociedad y Villarreal, bajo mi modo de entender y creo que de casi todo valencianista...faltaba banquillo, pero disponía de 11-13 jugadores de primer nivel para haber sacado muchisimos más puntos contra Cádiz, Getafe, Osasuna, Elche y demás...El talón de Aquiles fue la portería, mal cubierta con un Jaume excesivamente fallón e inseguro, y con un Cillesen casi siempre lesionado. También es verdad que ahí no presionaba nadie, y daba la sensación de parsimonia desde el banquillo un partido tras otro. En fin, a ver si esta temporada toca disfrutar, porque lo del año pasado fue deprimente!