Decenas de aficionados animaron a José Bordalás en su despedida como técnico del Valencia CF desde la céntrica calle Colón de València.
Tras una rueda de prensa en la que Bordalás no ha criticado su destitución como quizás se esperaba en las horas previas, el técnico alicantino se ha dado un baño de masas en la puerta del hotel. Cerca de un centenar de aficionados que se han hecho oír durante toda la comparecencia, le han esperado para darle una última muestra de agradecimiento. Bordalás ha hablado con alguno de ellos e incluso ha posado con una de sus bufandas. Los carteles de ‘Lim go home’ amarillos han sido los protagonistas y el técnico, por momentos emocionado, no ha dudado en aplaudirles y corear con ellos y agradecerles el cariño que han tenido con él como antes hizo en la rueda de prensa de despedida.
El técnico no se ha ido solo, ni mucho menos. Su cuerpo técnico, amigos y varias decenas de aficionados que han coreado su nombre, cánticos como "Bordalás te quiero", o "Peter vete ya" que se escucharon a través de las ventanas del salón dónde se celebró la sala de prensa en un céntrico hotel de València (NH Collection). Después siguieron cantando contra la propiedad ("Diles que se vayan") y canciones de ánimo al Valencia, como club y como entidad.
Mientras él hablaba, por los micrófonos se escuchaban perfectamente a los aficionados cantar al técnico que se va dejando un espacio enorme en la afición y al que sólo un penalti separó de un título, el primero de su carrera. Pero eso no hace si no que ratificar la común unión que existió entre la afición valencianista y el entrenador, en la sala de prensa, escuchando los cánticos, sólo ha tenido palabras de cariño hacia la hinchada. "Que hable Bordalás", se les escuchaba en la calle cantando "Valencia, somos nosotros" y le pedían que le "echara huevos" cuando llegaron abajo las noticias de que su despedida estaba siendo poco crítica con la propiedad.