La afición del Valencia CF y la de el Elche CF han vuelto a demostrar de que pasta están hechos. Previamente al encuentro correspondiente a la novena jornada de LaLiga Santander, valencianistas e ilicitanos se encontraron en los aledaños de Mestalla antes de presenciar un duelo importantísimo de cara a sus aspiraciones clasificatorias. Mestalla gozó de una gran entrada: 41805 espectadores. Un partido en el que el valencianismo quiso aprovechar para reivindicarse por los últimos acontecimientos sucedidos durante esta última semana. La unión hace la fuerza y durante el partido, el público quiso mostrar su opinión más sincera sobre los recientes hechos de Luis Rubiales. Ilicitanos y valencianistas se unieron para mandar un mensaje enclave al máximo mandatario de la Real Federación Española de Fútbol: "corrupción en la federación", "Rubiales dimisión" y "valencia somos nosotros". Claro y conciso en una sola dirección.
Cabe recordar que Rubiales le admitió a su padre que el Valencia CF le cae mal: "A mí (me caen mal) en este orden Villarreal, Sevilla y Valencia". Su padre también incluye al conjunto blanquinegro entre los equipos que menos le gustan. También hay que destacar que el Valencia CF ya tuvo bastantes problemas con la Federación y LaLiga Santander en tiempos pasados por la injusta sanción a José Luis Gayà y el injusto reparto económico del la última Supercopa disputada por el equipo che. Un motivo de mucho peso por el que quisieron hacer sonar el cántico "José Luis Gayà" con bastante fuerza. Además, también hubo una reivindicación entre la afición por la figura de Españeta al que le dedicaron un sonoro recuerdo.
Posteriormente llegó uno de los momentos clave de cada partido en casa: el minuto 19. Mestalla volvió a dejar clara su posición contra la gestión de la propiedad y pidió la marcha de Peter Lim. Cuando el colegiado pitó el penalti de Giorgi, la afición volvió a reclamarlo suyo. Tras el descanso y con la remontada en el bolsillo después de que Cavani disparase su arco en dos ocasiones, el público se dedicó a animar a los suyos. Bien es cierto que en los últimos minutos volvieron a contratacar a la Federación por las conversaciones de Rubiales.
Antes de arrancar el choque, los aficionados ya se hicieron notar durante el recibimiento de los autobuses de ambos equipos. El valencianismo se citó en la Plaza de la Afición para recibir a los suyos y los franjiverdes vinieron en masa a la capital del Turia para hacer volar a los de Almirón (debutante en Mestalla) hacia su primer triunfo de la temporada. Decenas de aficionados rodearon la entrada del autobús bajo la melodía de sus cánticos con el objetivo de llevarlos en volandas.
Tras el recibimiento ambas aficiones mezclaron sus colores frente al estadio y volvieron a demostrar la unidad que siempre existe entre ellos. La hermandad entre valencianistas e ilicitanos siempre destaca. Mientras los aficionados del Valencia CF coreaban a los de Gattuso, también aprovecharon para dar cariño a su rival con un mensaje claro y siempre escuchado en cada enfrentamiento entre ambos conjuntos: "el Elche es de primera".
Después de la previa, la afición entró al estadio y vaya que sí entró. Mestalla mostró una gran entrada para cosechar el enfrentamiento: 41805 espectadores. Ya desde la salida de los equipos del túnel de vestuarios cantaron el himno de la Comunidad Valenciana a una sola voz. Ambientazo para vivir un encuentro vital para afrontar una semana muy cargado de encuentros ligueros.