El Valencia CF tocó fondo (2-1) en el vital encuentro ante la UD Almería correspondiente a la jornada 28 de Liga Santander. Así, los de Rubén Baraja duermen una semana en puestos de descenso mientras que Hugo Duro, su apuesta en la delantera para visitar a los indálicos, no puso fin a su particular pelea con el gol. Y eso que fue el que más cerca tuvo el empate al cabecear arriba un centro de Gayà en los últimos minutos de partido.
El delantero madrileño fue la gran novedad del once titular. Tiene ritmo de partido pero ante el Rayo, cuando Baraja pudo disponer de Cavani, lo puso a jugar. Esta vez la apuesta fue distinta. Uno por otro, los dos terminaron formando una doble punta y, si la tarea de los delanteros es ver puerta, ninguno de ellos ha visto puerta desde que llegó el tercer entrenador al banquillo che y van ocho partidos.
Paradójicamente, tal vez las lesiones de Kluivert y de Nico González mantuvieron a Duro los noventa minutos en el campo. El dorsal 19 de este Valencia hizo el trabajo sucio, una vez más, peleándose y recibiendo faltas sin tener mayor peso en el juego ofensivo del equipo.
Tras la dolorosa derrota en el Power Horse Stadium, el Valencia alarga una racha de siete derrotas consecutivas a domicilio. No obstante, los datos asustan y la reacción es más necesaria que nunca de cara a los últimos cinco partidos del calendario lejos de Mestalla. Por ejemplo, que la sequía anotadora del Valencia duró 669 minutos pero no fue suficiente (el gol de Samu Castillejo) en Liga. Como ariete de este equipo, Hugo Duro asume su cuota de responsabilidad.
En el plano particular, no está siendo una temporada fácil para él. A las molestias que arrastró de su lesión en el tobillo hasta hace bien poco, hay que sumarle que un penalti fallado ante CA Osasuna que habría supuesto una inyección de ánimo. Tal vez ese fallo le privó de poder lanzar el que sí transformó Kluivert para poner el gol del empate ante los vallecanos.
Así, en pleno mes de abril, ha conseguido marcar 1 gol en 22 partidos disputados de Liga. Lo anotó en el mes de septiembre ante su exequipo, el Getafe CF. Tres meses después, su gol sirvió para cerrar la goleada en Copa del Rey ante La Nucia. Es el mes de abril y cumple otro trimestre sin celebrar un tanto.