¿Por cuánto debería vender el Valencia CF cada jugador para no perder dinero?

El mercado de fichajes comienza a moverse, también en clave Valencia CF. Después de la firma en propiedad de Cenk Özkacar, lo inmediato es abordar la renovación de Baraja que ya sabe según qué condiciones va a tener que sobrellevar para construir la plantilla de la temporada 2023/2024. Para ello, la ingeniería financiera es clave y los números dicen que el club valencianista estará en el mercado sin tantas urgencias como el año pasado para equilibrar el Fair Play Financiera. Además, las hipotéticas ventas de Giorgi Mamardashvili o Yunus Musah computarían casi en su totalidad como beneficio neto.

Por lo tanto, el Valencia se abre al mercado entre las exigencias de su vertiente deportiva (técnico y dirección deportiva) y la capacidad económica de un equipo que, más allá de no clasificar a Europa, ha perdido un pellizco tras acabar LaLiga Santander en la decimosexta plaza.

Las amortizaciones pendientes de los jugadores del Valencia CF

Así las cosas, estas son las amortizaciones pendientes de la plantilla actual del Valencia CF a partir del 1 de julio. Es decir, en caso de venta, restando la cifra pendiente, el resto se computaría como beneficio neto. Una docena de futbolistas todavía tienen pendiente la amortización de parte de su traspaso.

•  Doce futbolistas (Thierry, Paulista, Diakhaby, Almeida, Hugo Duro, Foulquier, Marcos André, Eray Cömert, Mamardashvili, Jorge Sáenz, Uros Racic y Cenk) deberían ser vendidos por distintas cifras para obtener un beneficio contable por su traspaso. La nota negativa es Marcos André, cuya amortización sigue siendo alta tras dos temporadas.
• En el caso de Cenk Özkacar, firmado hasta 2028 por 5 millones, a efectos contables, el central turco costará al club un millón de euros (más la ficha, que no es alta) por cada una de las temporadas que tiene firmadas).

Las amortizaciones, en el contexto de mercado

Para explicar la trascendencia de las amortizaciones en la estabilidad financiera del club, hay que retroceder a los últimos datos que accionistas pudieron consultar en noviembre de 2022 y que arrojan algunas cuestiones interesantes. En sus cuentas, el club reflejaba que, fuera del cierre del ejercicio, vendió por valor de 52 millones de euros (Guedes, Soler, Maxi...) y fichó por valor de 8 (André Almeida, por ejemplo, no contabilizando a Hugo Duro, correspondiente al ejercicio anterior).

El reto es mayúsculo ahora: la plantilla pasó de costar 80 millones a 54 (de 119 a 73 millones contando las amortizaciones pendientes). El objetivo fue reducir el coste para ajustarse al Fair Play Financiero. De ahí la gran cantidad de cedidos para suplir los jugadores que ya no están en propiedad, cuya parte de los salarios (el de Ilaix mayormente) se ahorra.

En otras palabras, las renovaciones se han concentrado en los canteranos (Jaume, Gayà o Guillamón, entre otros) y por tanto su coste es menor. Lo que ha de resolver, en todo caso, es el salario de jugadores como Castillejo, Paulista o Cavani cuya continuidad con los últimos movimientos no está clara.