Osasuna llega sin un viejo anhelo del Valencia

El Valencia buscará el pleno de victorias antes de que se cierre el mercado y lo hará frente a Osasuna este domingo a las 19:30h. Con seis de seis ya en el bolsillo, lo que supone el mejor arranque de la 'era Lim' en Valencia, los de Baraja tratarán de sumar tres puntos más que sigan aumentando la confianza de la plantilla y afición de cara a esa nueva temporada. El Osasuna, por su parte, viajará a Mestalla con una eliminatoria clave donde se juega media temporada: la previa de la Conference League ante, ni más ni menos, que el Brujas, equipo de Champions League el año pasado. Además, viajará a Valencia sin un jugador importante que este año no está teniendo protagonismo, el Chimy Ávila.

El futbolista argentino ya vio el año pasado como estaba relegado a jugar en banda y sin ser titular en todos los partidos. Pese a ello, el delantero anotó ocho tantos en 29 partidos. Esta temporada, el Osasuna ha fichado a Raúl García de Haro, lo que hace presagiar otra temporada difícil para el delantero que, con un nervio temperamental, vio la roja directa frente al Athletic Club la pasada jornada. Encima, Arrasate le dio una colleja en sala de prensa, asegurando que "esto no es Osasuna. Pido perdón al Athletic". 

Cara y cruz frente al Valencia

Ante el conjunto blanquinegro, el Chimy ha probado las dos caras de la moneda en los últimos años. El año pasado, el Valencia venció en El Sadar con un resultado de 1-2, con goles de Kluivert y Diakhaby. El argentino, con 0-2 en el luminoso, pudo recortar distancias desde los once metros, pero el lanzamiento se fue directamente por encima del larguero. Sin embargo, el año anterior no falló y, también desde los once metros, anotó el primero de Osasuna en la victoria del cuadro navarro por 1-2 en Mestalla.

Chimy Ávila, relacionado con el Valencia

Corría la temporada 2019-2020, es decir, la primera de Chimy Ávila en Pamplona tras su paso por Huesca, y el Valencia anduvo interesado en hacerse con los servicios del delantero argentino. Por entonces, había marcado 11 goles: su primera lesión del cruzado frenó los contactos. El Valencia CF guardaba entonces la carta de los puestos europeos y, no menos importante, el hecho de tener cedido en Pamplona a Toni Lato. Los resultados deportivos marcaban quién era el fuerte y quién el débil en un traspaso que no pudo realizarse. Los papeles han cambiado.