Este jueves, coincidiendo con el Logroñés-Valencia de Copa del Rey, se cumplen 27 años de una de las humillaciones más duras que ha sufrido del club de Mestalla en su historia. El 2 de noviembre de 1993, el Valencia CF fue derrotado en Karlsruher con una goleada por 7-0. Sin duda, uno de los recuerdos más amargos para toda una generación de valencianistas que difícilmente podrán sacarse una espina tan profunda como la que dejó aquella actuación de los hombres de Guus Hiddink. El Karlsruher - Valencia es, la peor afrenta en la historia europea del Valencia cumple un cuarto de siglo. Hoy en día, hace casi mil cuatrocientos días que el Valencia ni tan siquiera disputa competición europea.
Desde la llegada en 2014 de Peter Lim al club como máximo accionista de la entidad, el Valencia sólo ha accedido a torneos europeos en tres de las nueve campañas ya completadas y este año, de momento es noveno.
Una de las páginas más negras de la casi centenaria historia del club se vivió en el Wildparkstadion ante el Karlsruher SC, en donde se acabó el sueño de la Copa de la UEFA en 1993. En aquella eliminatoria el Valencia dio la cara en Mestalla, pero en la vuelta el conjunto alemán borró del mapa a los ché y el bochorno se apoderó de muchos aficionados que aún recuerdan aquellos cuatro goles de Edgar Schmitt que fueron una losa. Toda una humillación que culminó con 25.000 gargantas alemanas entonando el ¡Viva España! a modo de burla En la ida, el Valencia había ganado 3-1, pero ni por esas.
El equipo valencianista lo intentó durante los primeros minutos pero las circunstancias sobrepasaron a los jugadores blanquinegros que no dieron la talla y se derrumbaron ante la insistencia teutona.
Tras aquel episodio bochornoso, el Valencia se reinventó y echó tierra encima de la hoguera con años ganando títulos y formando el mejor Valencia de la historia tan sólo una década después. Antes tuvo, sin embargo, una larga travesía por el desierto que comenzó con una debacle en la Liga. No en vano, el Valencia CF llegó como líder de Primera División al Wildparkstadion de Karlsruhe y tras haber ganado 3-1 en Mestalla.
Tras el desastre de Karlsruhe, que supuso la eliminación europea, el Valencia CF cayó de la primera posición en la tabla a la decimocuarta al encadenar 10 partidos sin ganar en la competición liguera.
Además en aquella racha negativa, el conjunto valencianista se despidió de la Copa del Rey al caer eliminado a manos del Tenerife. La debacle de Karlsruhe, fue la sentencia de Guus Hiddink al frente del banquillo valencianista, aunque este volvería meses más tarde, repescado por Paco Roig que se estrenaba como presidente del Valencia CF. Ni Paco Real ni Héctor Núñez fueron el antídoto que necesitaba el vestuario ché para reaccionar.
Hoy en día, tras el excepcional año del Centenario, el Valencia sigue alejado de Europa. En diciembre del año pasado se cumplieron mil días fuera de las competiciones europeas. El club valenciano, acostumbrado a participar en competiciones europeas desde que en los años sesenta del pasado siglo se estrenara en la Copa de Ferias, en la que levantó el trofeo en las dos primeras ediciones que disputó (1961 y 1962), no ha competido en partidos europeos desde el 10 de marzo de 2020, cuando fue eliminado en los octavos de final de la Liga de Campeones por el Atalanta, que ganó el encuentro de vuelta de aquella ronda continental en Mestalla (3-4).