David Villa, una leyenda que cambió el blanquinegro por el blaugrana
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Villa jugó en el Valencia CF entre 2005 y 2010
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El FC Barcelona lo fichó por 40 millones en 2010
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En el club de Mestalla marco 129 goles en 225 partidos
El Valencia CF se medirá en Mestalla con el FC Barcelona el próximo sábado, 16 de diciembre a las 21:00 horas. Este encuentro, correspondiente a la jornada 17 de LaLiga EA Sports 23-24, será clave para un Valencia CF que solo ha ganado a los culés en uno de los últimos dieciséis partidos como local. La lista de jugadores que han vestido estas dos camisetas es larga supera los setenta, pero si un nombre destaca sobre el resto es el de David Villa. El Guaje disputó 225 partidos con la elástica blanquinegra entre los años 2005 y 2010, marcando un total de 129 goles y convirtiéndose en el quinto máximo goleador de la historia del Valencia CF. Sin embargo, tras el Mundial de 2010 en Sudáfrica, hizo las maletas y se marchó al FC Barcelona.
La entidad blaugrana pagó 40 millones de euros para hacerse con los servicios del asturiano, que permaneció en Can Barça tres temporadas. Allí, anotó 48 goles en 119 partidos, y consiguió consiguió 1 Champions, 2 Ligas, 1 Copa del Rey, 2 Supercopas de España, 1 Supercopa de Europa y 1 Mundial de Clubes. Posteriormente, fue vendido al Atlético de Madrid por 2,1 millones de euros.
El David Villa del Valencia CF: gol y leyenda
David Villa es una auténtica leyenda para el Valencia CF. El futbolista tiene una lona en Mestalla donde acompaña a ilustres del Valencia CF en ese segundo piso como son Fernando Gómez Colomer, Ignacio Eizaguirre, Juan Cruz Sol o Amedeo Carboni. Esas lonas sólo se despliegan en momentos puntuales ya que, a esa altura, el viento podría poner en peligro su estabilidad.
En el piso inferior se encuentran siempre fijas las lonas de Antonio Puchades, Mundo Suárez, Pep Claramunt, Mario Kempes, David Albelda, Rubén Baraja, Claudio López, Santiago Cañizares, Ricardo Arias, Gaizka Mendieta, Fabián Ayala y Miguel Ángel Angulo. Por eso, cuando se toca su nombre, la afición valencianista se pone de uñas y a la defensiva.