La "montaña rusa" de Baraja hacia la salvación: “He mejorado como entrenador y persona”

Rubén Baraja, entrenador del Valencia CF, analiza en profundidad todo el proceso que le llevó al banquillo de Mestalla, para revertir la situación del equipo hasta lograr la salvación en la temporada 2022/23. “Estoy convencido de que he mejorado como entrenador y como persona”, explica el técnico vallisoletano.

En el adelanto de la entrevista para el portal The Coaches’ Voice, publicado el pasado noviembre, Baraja detalló sus dos momentos más felices como entrenador valencianista. Además, consideró a la afición y a Mestalla como las claves de la salvación. En el repaso al proceso de la salvación del Valencia, Baraja comentó otros diferentes aspectos.

Su llegada al banquillo

Baraja llega al Valencia en una situación confusa. El mismo Baraja comenta que los jugadores estaban “un poco descolocados” por la marcha de Gattusso y la interinidad de Voro. A partir de su llegada, Baraja intenta convencer a los jugadores de que eran “mejores que los resultados que se iban dando” y darles una “inyección de confianza y seguridad” para que los jugadores creyeran y así poder mantener al Valencia en Primera División la temporada siguiente.

Creer que la salvación se podía conseguir

El propio Baraja declara que él iba a contracorriente del ambiente pesimista, que creía que con trabajo, orden, agresividad e intensidad “se podían ir consiguiendo cosas”. Asimismo, Baraja cuenta que para él fue clave convencer al equipo para que creyera en su fórmula para afrontar los partidos y eso llevó a conseguir resultados para seguir vivos y tener “esperanza” en la fase final del campeonato.

Revertir la situación

Tras una mala racha de resultados, Baraja explica que “todo el trabajo que veníamos haciendo” se vio reflejado tras vencer en Elche, en lo que el preparador vallisoletano cree que fue el clic anímico para los jugadores. Después de la victoria en Elche, el Valencia encadenó una serie de resultados que “nos daba la posibilidad de creer en el objetivo y acercarnos un poco más”, detalla.

En la última parte del campeonato, Baraja expone que tenía la sensación de “estar en la nube y bajar al suelo", así continuamente. Es una montaña rusa de emociones”. Las victorias ante Celta y Real Madrid acercaban al Valencia a la salvación, pero Baraja manifiesta que en las tres últimas jornadas sintió “realmente la verdadera presión o la responsabilidad de poder haber bajado a Segunda División con el equipo de tu vida”.

El momento más complicado

El técnico rememora su momento más complicado durante ese proceso: el partido ante el Espanyol. Baraja lo considera un momento fundamental. “Es un partido en el que nosotros estamos bien, arrancamos bien el partido, nos ponemos 1-0 y antes del descanso nos hacen el 1-1”, expone. El posterior 1-2 del Espanyol hace que “Mestalla se ponga nervioso”, porque con ese resultado, el Valencia debía ir a Sevilla a ganar. “Conseguir el 2-2 fue una liberación porque es verdad que era un resultado que nos daba ir a Sevilla con más posibilidades de conseguir el objetivo”, finaliza.

Una mezcla de sensaciones

Baraja también explica que coger el equipo fue una “montaña rusa de emociones”. “El hambre y las ganas de ayudar te hacen tener una gran determinación y responsabilidad por conseguir los resultados”, recuerda. El partido ante el Betis acaba en empate y certifica la salvación del Valencia. “La liberación que sentimos tanto Carlos como yo tras haber conseguido el objetivo es un momento único”, recapitula. “Son los dos momentos que yo guardo con más cariño. El primero nada más llegar, en mi presentación y el último cuando conseguimos el objetivo de dejar al Valencia en Primera División”, concluye Rubén Baraja.