Se veía como un utopía a principio de temporada, empezó a ser un sueño con el paso de las jornadas y se convirtió en una realidad hace unas semanas, pero la mala dinámica en este tramo final deja al Valencia CF sin opciones matemáticas de Europa. Una vez más con Peter Lim y ya será la quinta campaña seguida, el club de Mestalla se quedará sin jugar competiciones europeas. Pese a que las victorias en Granada y Pamplona hicieron crecer el optimismo, los resultados posteriores (cuatro derrotas y un empate) han terminado por condenar al elenco de Rubén Baraja. Dicho sea de paso, el objetivo marcado por el club -la salvación- se ha conseguido de forma holgada.
En ElDesmarque, analizamos cinco de las causas -seguro que hay muchas más- de la caída del Valencia CF en el tramo decisivo:
Es una obviedad que el equipo ha llegado justo de energía a este tramo final de la temporada. Muchos factores han tenido que ver en esta primera causa de la caída del Valencia CF, pero la presión, las continuas bajas y la plantilla corta son las principales. Algo más de 20 chavales, muchos de ellos en su primera campaña completa como profesionales, han mantenido al club de Mestalla con un hilo de esperanza hasta la jornada 36, pero las piernas empezaron a pesar unas semanas antes. Los resultados lo muestran a la perfección: cuatro derrotas y un empate.
Tras un buen inicio de la temporada, el Valencia CF llegó al mes de enero bin situado en la tabla clasificatoria y todavía vivo en la Copa del Rey. Era la situación perfecta para acabar de dar un empujón al equipo en forma de refuerzos, pero Peter Lim se opuso a que hubiese inversión. Solo la salida de Gabriel Paulista, titular indiscutible por aquel entonces, provocó que llegase Peter Federico, que no ha empezado a tener protagonismo hasta estas últimas semanas. Y lo peor, que parece que la política desde Singapur seguirá siendo la misma en verano.
El Valencia CF ha acusado sobremanera durante las últimas semanas las bajas de Mouctar Diakhaby, Fran Pérez, Jesús Vázquez o este jueves las de Pepelu y Hugo Duro, pero lo que sí que ha notado el vestuario en este tramo crucial ha sido la ausencia de su capitán. En los 13 partidos que se ha perdido en la presente temporada, sin contar el del Reale Arena en el que ya tuvo minutos, el equipo apenas ha conseguido tres victorias, cuatro empates y seis derrotas. Estos datos hablan por sí solos de su importancia.
Justo cuando eran necesarios los goles, llegó la sequía en el Valencia CF. El equipo encadena tres partidos sin marcar y en las últimas 10 jornadas en LALIGA, promedia la cifra de 0,6 goles por encuentro.
Si todos estos factores los unes a la mala fortuna que también ha tenido el Valencia CF, el resultado es el que es. Ante el Real Betis, el 1-2 llega de rebote en el mejor momento. En Barcelona, la expulsión de Giorgi Mamardashvili condenó a un equipo que estaba siendo superior e iba por delante en el marcados. Para más ende, aquel fuera de fuego posicional no pitado de Fermín supuso el gol de la remontada. Esa misma jugada, con 0-0, fue anulada en Mestalla en la derrota 0-1 ante el Deportivo Alavés. Hubiese sido el empate con minutos por jugarse. La jornada siguiente, Roman Yaremchuk falló a placer y el resultado terminó siendo 0-0 ante el Rayo. Y la gota que colma el vaso es esa ocasión de Alberto Marí en el Reale Arena, con Álex Remiro en el suelo y toda la portería para él. La lanzó al cuerpo del portero.