Que Valencia tiene opciones de ser sede del Mundial 2030 con el Nou Mestalla es algo evidente porque son varias de las máximas autoridades del deporte español las que lo han dicho en los últimos días. Una semana es Rafael Louzán, presidente de la RFEF, otras José Manuel Rodríguez Uribes, presidente del CSD, y ahora lo ha hecho Salvador Gomar, presidente de la Federación Valenciana y una de las patas de la candidatura de Valencia.
En la Jornada “Violencia y racismo en el deporte: acciones para su prevención” organizada por la Universidad CEU Cardenal Herrera junto a la Asociación de Futbolistas del Valencia CF, Gomar ha dado la prueba de que las opciones con el Nou Mestalla están vivas.
Así, al ser preguntado por las opciones, Gomar se ha mostrado esperanzado y ha dado los siguientes argumentos: “Tengo esperanza porque lo ha dicho Rafa Louzán, él está en contacto con FIFA y nosotros también hemos estado en contacto. De hecho, nos siguen solicitando información y documentación, con lo cual significa que esta sede está viva, no está terminada. De todas formas, no es un tema tan difícil. En el próximo mundial hay dos sedes que han cambiado hace un año y pico. Es decir, que esto pasa normalmente. Valencia lo que tiene que estar es preparada para estar en la pole position, como se dice”.
Con todo, Salva Gomar esgrime como argumento, al margen de la documentación, las palabras de su homólogo en la Española para ser sede. Eso sí, desconoce si será por sustitución de otra sede en litigio o cómo será. “Sé lo mismo que vosotros y cuando hablas con él [con Louzán], me dice: ‘Confía, Salva, Confía en ser sede’. Yo nunca he desconfiado. Siempre hemos estado peleando y siempre luchando para que haya sede aquí en Valencia. La forma, si es eliminar o es aumentar, no lo sé. La FIFA es la que tiene que venir aquí, estudiar los estadios que hay, las obras cómo funcionan en cada una de las sedes. Pero lo desconozco, lo que hemos oído todos: Málaga, Coruña, Zaragoza. Aunque todas estas obras están ahí, parece que vayan a ir en marcha. Al final, Valencia tiene que estar preparada para poder ser sede. Es lo único, la esperanza que nos queda”.