Mercedes Coghen, capitana de la selección española de hockey que ganó el oro en Barcelona'92, dijo a EFE que el vínculo entre las jugadoras de aquel equipo "es para siempre" y que antes de saltar al campo a jugar la final contra Alemania animó a sus compañeras al grito de "chicas, hoy nos las comemos".La exjugadora cree que para las integrantes de aquella selección "no fue una sorpresa" convertirse en campeonas olímpicas por todo lo que se habían preparado para llegar a las semifinales y calificó como "frustrantes" los argumentos en favor de Río para concederle los próximos Juegos en lugar de Madrid, cuya candidatura dirigió.
Pregunta (P): ¿Qué recuerda de los Juegos de Barcelona?
Respuesta (R): Eran nuestros primeros Juegos, habíamos trabajado mucho, llegamos con mucha ilusión. Solo tengo recuerdos buenos. La villa era preciosa y ver a todo el equipo español y a tanto atleta... Estábamos muy concentradas y tengo un recuerdo muy especial del público, del calor de la gente y lo que nos animaba.
Para nosotros, que somos un deporte tan pequeño, tener ese público tan cercano era una sensación de estar siempre con el pelo de punta.
P: ¿Pero dieron la sorpresa al ganar el oro?
R: Creíamos ya mucho en nosotras. Programamos nuestro entrenamiento para enfrentarnos a nuestros rivales directos alguna vez y ganarlos y eso lo habíamos conseguido en el mes de abril, incluso a Holanda, que había sido nuestra bestia negra, aunque no estaba en nuestro grupo. Nuestra sensación era que podíamos y nos habíamos propuesto entrar en semifinales, porque ahí cualquier cosa podía pasar. Así que sorpresa para nosotras no, para el resto sí.
P: ¿Se acuerda de la final y de las horas previas?
R: Recuerdo haber dormido muy bien. Debería estar supernerviosa, pero me recuerdo mirando el techo con tranquilidad, como cuando estudias mucho y vas confiado a un examen, esa era la sensación. El rival iba a volver a ser el mismo, Alemania, que fue el primer partido de Juegos. Como jugamos tan mal aquel partido y empatamos, ese fue el mensaje que di en el corro: 'chicas lo hicimos muy mal y no nos consiguieron ganar, hoy nos las comemos'. ¿Qué puedes decirle a un grupo que lleva tanto tiempo junto, dejando familia y compromisos? Que todo aquello nos iba a llevar a ganar.
P: ¿Y de después al recoger la medalla?
R: En la celebración recuerdo mucho abrazo y lágrimas de emoción. Luego la fiesta en el Club Egara es un recuerdo inolvidable, aunque me habría gustado tener un doble y ver las cosas desde fuera, porque cuando aquel señor mayor te está poniendo la medalla son tantas emociones que no te da tiempo a asumirlas. Tengo un mueble antiguo con copas, medallas, muy a mano, porque a la gente le gusta verlo.
P: ¿Cómo grupo mantienen alguna relación?
R: Con unas más y con otras menos. Hace años cuando cumplimos una cifra redonda de aniversario nos juntamos en Santander 13 jugadoras y 3 o 4 del equipo técnico, con nuestro entrenador José Brasa, tan único, y jugamos un partido con nuestros uniformes. Nos hemos ido viendo. Seguimos siendo las mismas y seguimos teniendo ese vínculo para siempre.
P: ¿Qué diferencia a los Juegos de otras competiciones?
R: En unos Juegos todo el mundo comparte las mismas ilusiones y habla el mismo lenguaje, entiendes la relación que puedes tener con cualquier persona del mundo. Por eso los que son profesionales se dan cuenta de que hay un espíritu diferente. Yo he tenido mucha suerte. La ilusión en la cara el día que ganas los Juegos es única.
P: ¿Qué espera del hockey español en Río?
R: Nos tenemos que felicitar porque mi Federación ha sufrido con los recortes. Tenemos poca visibilidad, hemos vivido haciendo grandes esfuerzos. Por las circunstancias ya es un éxito estar con los dos equipos, tenemos muchos jugadores fuera de España pero se esta trabajando con gente nueva con un gran esfuerzo, veremos si les da tiempo a llegar para dar campanadas. Bélgica entrena un día a la semana con sus jugadores seleccionables, pero nosotros tenemos algo especial, somos muy creativos y capaces de improvisar y sacar lo mejor en circunstancias difíciles. Yo les doy un voto de esperanza, la meta es entrar en semifinales. Ese día te puede salir bien.
P: En Londres no estuvo la selección femenina de hockey, pero las chicas españolas tiraron del carro, ¿cree que será igual en Río?
R: Es tan difícil llegar como mantenerse. Una vez que consigues ciertas metas es difícil seguir siendo tan ambicioso. No todos somos Pau Gasol, una persona que tiene muy claras sus metas y que le sigue gustando dar lo mejor. Las chicas cuando llegan al alto nivel son muy responsables. Tenemos grandes posibilidades de que ellas sigan sacando la cabeza por el deporte español, pero los Juegos están cada vez más caros y cada vez hay más países que se incorporan.
P: ¿Qué piensa cuando ve los problemas actuales de Río?
R: Siento mucha rabia. Me parece frustrante todos los argumentos que pusieron enfrente a Madrid para dar los juegos a Río, incluido el económico. Nosotros empezábamos una crisis bestial y no teníamos los apoyos o la solidez de decir vamos a poder hacer unos Juegos magníficos y ahora ves que el que está en unos problemas tremendos es Río y que lo que pusieron sobre la mesa se ha incumplido.
Todo lo sincero en el valor del deporte y el esfuerzo muchas veces en las candidaturas a los Juegos ves que es diferente, que todo lo que trabajas no se pone de manifiesto, pero son detalles que no controlas, que no tienen que ver con los valores del deporte, son muchas circunstancias, muchos intereses geopolíticos y de márketing.
Hay que entender que las realidades del día que te dan los Juegos no tienen que ver con lo que se plantea después y eso es bastante frustrante para alguien que ha estado dentro de una candidatura y que ama el deporte como yo. Un país necesita mucha estabilidad. Tiene que ser un proyecto de estado.