Mónica Puig, convertida en la primera mujer en lograr una medalla olímpica para Puerto Rico tras alcanzar la final del cuadro individual femenino y ganar a la checa Petra Kvitova, subrayó su condición de latina y el amor a su país.La jugadora de 22 años reconoció haber recibido invitaciones para jugar por Estados Unidos pero las rechazó. "Sí, recibí invitaciones para jugar por Estados Unidos pero soy muy fiel a donde nací y de donde vengo. Soy muy latina y amo a Puerto Rico con todo mi corazón. Mientras juegue a tenis defenderé a Puerto Rico", expresó la jugadora de San Juan.
Puig, de abuelos españoles, relató su victoria en semifinales como un sueño. "Es increíble pero más la oportunidad para competir por la final. Estoy lista para lo que sea. Tengo una medalla pero sé de que color la quiero", advirtió.
Del partido comentó que "fue muy difícil porque había que asegurar al menos una medalla. Ahora que he asegurado una sé que las posibilidades de lograr el oro son altas porque estoy jugando muy bien al tenis y eso es lo que quiero", insistió.
Mónica Puig se aventuró a indicar que la final olímpica es y será el mayor logro de su carrera. "Esto es lo más grande que he cumplido y lo más grande de todo lo que voy a cumplir. Esto es un sueño. Los Juegos son cada cuatro años y ahora estoy en la final".
La tenista boricua se transforma cuando juega por su país y que intentará aprenderse el himno por si gana el oro. "Cuando juego con Puerto Rico soy otra persona. Ensayaré el himno de Puerto Rico porque todavía no me lo se. Pero voy a estar llorando", advirtió.