Alemania y Hungría, países con mayor número de preseas olímpicas en piragüismo en aguas tranquilas, disputan a partir de mañana, en los Juegos Olímpicos de Río de Janeiro, la hegemonía en esta disciplina, en la que la española Teresa Portela y el brasileño Isaias Queiros esperan medallas.Las pruebas de piragüismo, en canoa (C) y kayak (K), se disputarán entre el lunes y el sábado en la Lagoa Rodrigo de Freitas, una laguna exprimida entre la playa de Ipanema y el cerro del Corcovado cuyas aguas generaron polémica por su nivel de contaminación aunque el COI ha garantizado que están en niveles adecuados para la salud.
El piragüismo en aguas tranquilas o canotaje de velocidad, disciplina olímpica desde los Juegos de Berlín 1936, otorgará doce oros en Río en ocho modalidades en masculino (K1 200 metros, K2 200 metros, K1 1.000 metros, K2 1.000, K4 1.000 metros, C1 200 metros, C1 1.000 metros y C2 1.000 metros) y cuatro en femenino (K1 200 metros, K1 500 metros, K2 500 metros y K4 500 metros).
La ausencia de varios palistas bielorrusos por causa del veto a ese país centrará la disputa por la hegemonía en Alemania y Hungría.
Los bielorrusos fueron los mayores medallistas en el Mundial de Milán del año pasado, con cinco oros, seguidos por los alemanes (4) y los húngaros (3), pero en los Juegos Olímpicos de Londres 2012 la mayor potencia fue Alemania (tres oros, dos platas, dos bronces), seguida por Hungría (tres, dos y uno) y por Gran Bretaña (dos, una y uno).
Un duelo directo será en la prueba de canoa con un palista en 1.000 metros (C1 1.000m), en la que Alemania acumula cuatro oros y Hungría tres, una hegemonía que desde Sydney 2000 sólo fue amenazada por el español David Cal, medallista en las tres últimas ediciones.
El máximo favorito este año es el alemán Sebastian Brendel, actual campeón olímpico y europeo, así como mundial en 2014, pero que está en la mira del húngaro Attila Vadja, bronce en Londres 2012 y subcampeón mundial el año pasado.
El mediador en el duelo puede ser el brasileño Isaquias Queiroz, una de las esperanzas de medalla olímpica del país anfitrión y cuyo entrenador, el español Jesús Morlán, fue el técnico de Cal.
Queiroz también disputará las pruebas de C2 1.000 metros, en la que conquistó oro en el Mundial del año pasado, y C1 200 metros, en la que obtuvo un bronce.
Alemania y Hungría igualmente tendrán un duelo particular en el kayak con dos palistas en 500 metros (K2 500m) femenino, en que las húngaras fueron campeonas mundiales en 2015 y europeas este año y las alemanas las vigentes campeones olímpicas y campeonas mundiales en 2013.
Ambos países también se batirán por el oro en el kayak con cuatro palistas 500 metros (K4 500m) femenino, en que las húngaras son campeonas olímpicas de 2012, mundiales de 2013, 2014 y europeas de 2016, y las alemanas subcampeones olímpicas en 2012 y terceras en el Mundial de 2015.
Los húngaros Henrik Vasbanyai y Robert Mike, campeones mundiales en 2013 y subcampeones en 2014 y 2014, figuran como favoritos para la prueba de C2 1.000 metros.
Los húngaros Sandor Totka y Peter Molnar, campeones mundiales en 2015, parten como favoritos para la prueba de K2 200 metros.
En K1 1.000 metros, en cambio, el favorito es el alemán Max Hoff, plata en Londres 2012, campeón mundial en 2013 y 2014 y campeón europeo en 2014.
En la prueba de canoa con un palista en 200 metros (C1 200m), con la ausencia del bielorruso Artsem Kozyr, campeón mundial en 2015, los favoritos son el ucraniano Iurri Cheban, campeón olímpico en 2012 y campeón mundial en 2014; el chino Li Qian, subcampeón mundial el año pasado, y el brasileño Queiroz, bronce en el Mundial de 2015.
El canadiense Mark de Joge, bronce en Londres 2012 y campeón mundial en 2014 y 2015, es el favorito en K1 200 metros, prueba en la que también tiene posibilidad de medalla el español Saúl Rivero, que fue bronce en los mundiales de 2013 y 2014.
En femenino la máxima favorita en K1 200 metros es la neozelandesa Lisa Carrinnton, que no pierde ninguna disputa desde que ganó el oro en Londres 2012 y que también tiene opciones de ser medallista en la prueba de K1 500 metros, de la que es la actual campeona mundial.
Pero una de sus principales rivales en los 200 metros es la española Teresa Portela, tercera en el Mundial del año pasado, que disputa sus quintos Juegos Olímpicos consecutivos y a quien un error en la salida la privó de medalla hace cuatro años por sólo 198 milésimas de segundo.