Astou Ndour, una de las jugadoras clave en la victoria de España sobre Serbia en las semifinal olímpica en la que España se ha asegurado la medalla de plata en el torneo de Río de Janeiro, confesó que lo conseguido este jueves "es un sueño hecho realidad" que todavía no se cree.
"Es un sueño hecho realidad, pero todavía no me lo creo", dijo, dispuesta "primero a disfrutarlo y después esperar a ver lo que pasará el sábado" en la final. "Lo que salga, a lo mejor podemos ganar a Estados Unidos, quien sabe", apuntó eufórica.
Ndour aseguró que la clave del triunfo ha sido la defensa. "Hemos defendido bastante porque a Serbia, si la paras allí y coges el rebote, corres el contraataque y vas haciendo puntos. Lo hemos hecho y por eso ha salido el partido así", relató.
"Ya habíamos jugado contra ellas y teníamos bastante controlado lo que iban a hacer, hemos hecho lo que tocaba. A las serbias, si no las dejas coger el rebote se van frenando. Y si las dejas coger rebotes, salen al contraataque. Lo hemos parado y encima no han metido muchos triples, que es su juego", se congratuló.
La senegalesa de nacimiento se acordó de Sancho Lyttle, la jugadora que se lesionó en la preparación olímpica y a la que sustituyó para estar en Río, y consideró que fue "una pena" que la de San Vicente y las Granadinas, también nacionalizada, no pudiera estar en estos Juegos. "Me da pena por ella, pero es así el mundo del baloncesto", asumió.
Ndour ha recordado que cuando la llamaron para sustituir a Lyttle "estaba en San Antonio" y que para ella fue un sueño. "Estaba gritando, supercontenta. Y ahora estoy aquí disfrutándolo", dijo.
Ndour se ha mostrado agradecida al equipo porque le haya pedido que "no coja la responsabilidad de ser ella (Lyttle)". "Somos jugadoras diferentes. Ella marca más diferencias que yo. Yo estoy aquí ayudando al equipo en lo que puedo hacer, corriendo, cogiendo rebotes o lo que sea", explicó. En el histórico partido de hoy, Ndour ha terminado con 14 puntos, 6 rebotes, 3 tapones y 18 de valoración.
En un día tan feliz, Astou se ha mostrado muy agradecida al trabajo de "estos días" en brasil, a sus "compañeras, al cuerpo técnico y a la gente que siempre ha estado apoyando al baloncesto femenino".
Y se ha acordado de los entrenadores Domingo Díaz y Begoña Santana, que fueron a Senegal a buscarlas para que jugase a baloncesto. A ellos les quiere dedicar el sueño que ha cumplido.
"Estaba en Gran Canaria y me dije que a ver si un día lo puedo lograr. Ya llegó mi día, estoy superemocionada, agradecida al trabajo que hice estos años y, sobre todo, a la que gente que ha confiado en mí. a Begoña y a Domingo, que me han traído desde Senegal, que ha confiado en mí y me han dicho que puedo ser estrella en el mundo del baloncesto", dijo.