Tras la victoria conseguida hoy por Brasil ante Italia en la final de los Juegos de Río 2016 y que supuso la conquista del tercer oro olímpico de la selección brasileña de voleibol, su capitán, Bruno Rezende, se acercó a las gradas del pabellón Maracanazinho a celebrar el triunfo con el futbolista Neymar.El astro de la 'canarinha' y del FC Barcelona, que ayer lideró a su selección en la consecución del primer oro olímpico de su historia, presenció este domingo a la final del torneo de voleibol que le ha valido a los locales colgarse la presea dorada al cuello tras doce años de espera y aprovechó las pantallas del pabellón para mostrar su apoyo a sus compatriotas durante un descanso.
Con la conseguida hoy, el equipo dirigido por el técnico Bernardo Rezende, que es también el padre de Bruno, cuenta con seis preseas olímpicas en sus vitrinas; tres de oro (Atenas 2004 y Barcelona 1992) y otras tantas de plata (Londres 2012, Pekín 2008 y Los Ángeles 1984).
Por su parte, Neymar se consolidó este sábado como el nuevo ídolo de los brasileños al conquistar, ante Alemania y en el emblemático estadio Maracaná, la primera medalla de oro olímpica de una selección a la que sólo le faltaba este honor en su extenso palmarés.