Sixto Jiménez, seleccionador olímpico de voley playa, ha lamentado la "mala suerte" que tuvo en Río la pareja española Pablo Herrera-Adrián Gavira al cruzarse con los brasileños Alison Cerutti, apodado 'el Mamut', y Bruno Oscar Smith, a la postre campeones olímpicos, lo que les impidió llegar más lejos.El técnico onubense, que ha pasado unos días en Huelva tras volver de sus quintos Juegos, ha declarado a Efe que esperaban "llegar más lejos", pero que tras ganar a los cabezas de serie de su grupo y pasar como primeros a octavos tuvieron la mala fortuna de enfrentarse a esta pareja brasileña, que jugaba en casa y es "la más potente del mundo".
"No es consuelo de tontos. No hay que poner excusas porque nos ganaron bien y son mejor equipo que nosotros", ha admitido Jiménez, que ha recordado que en el primer set estuvieron "cerca de ganarlo" y que en el segundo no pudieron remontar la desventaja.
No obstante, ha destacado que el equipo español jugó "lo mejor" que pudo y dio "una buena imagen" durante todo el torneo en Río, por lo que deben estar "satisfechos", aunque ha incidido en que con otros rivales probablemente hubieran logrado un diploma olímpico.
El técnico español ha considerado que la pareja española está en condiciones de llegar a Tokio 2020, pues Adrián Gavira es aún joven y Pablo Herrera, que tendría 38 años en la próxima cita olímpica, "tiene mucha ilusión y se ha propuesto llegar a sus quintos Juegos".
Jiménez, que como jugador fue diploma olímpico en Atlanta 96, era hasta el oro de Carolina Marín en bádminton el deportista onubense con una mejor actuación en unos Juegos y se ha mostrado encantado de que una paisana no solo haya alcanzado el podio por primera vez, sino que se haya proclamado campeona.
"Es una alegría que Carolina me haya superado para llegar a lo más alto, porque es una chica estupenda", ha resaltado el seleccionador de voley playa, para quien es "un placer verla jugar y nos hace sentir a todos muy orgullosos de que sea de nuestra tierra", añadió.
Sobre la organización de Río 2016, ha opinado que de los cinco Juegos en los que ha estado "éstos son los peores", al afirmar que en la preparación "no han llegado a tiempo" y que la seguridad ha estado "fatal y no ha pasado nada porque Dios no ha querido", además de que ha habido "mucha improvisación".
Sixto Jiménez ha reconocido, sin embargo, que el estadio de voley playa estaba "bien montado y en un sitio emblemático como Copacabana", pero ha precisado que en la villa olímpica los apartamentos "no estaban terminados del todo" y la comida "resultaba un poco cansina".