El esquiador oscense Miguel Galindo, guía de Jon Santacana, declaró que, pese a finalizar cuartos en la prueba de Descenso de los Juegos Paralímpicos de PyeongChang, el resultado es para estar "contento y satisfecho" porque siguen manteniéndose en la elite tras dieciséis años juntos, aunque "sin un equipo grande cuesta".Miguel Galindo, de 36 años, está afrontando en PyeongChang sus cuartos Juegos Paralímpicos como guía de Jon Santacana y juntos son una de las parejas más veteranas del circuito.
"Llevo dieciséis años entrenando con Jon como pareja. Cada vez hay menos esquiadores en el equipo paralímpico y hemos notado esa ausencia. Cuesta cuando no tienes un equipo grande. Mirando para atrás se ve que hemos estado muchos días fuera, en muchas competiciones y nos hemos podido mantener en la elite", dijo Galindo, al término de la prueba.
Los españoles se quedaron a un paso del podium en la modalidad de Descenso al finalizar en cuarta posición, a 94 centésimas del bronce que se colgó la pareja italiana formada por Giacomo Bertagnolli y Fabrizio Casal.
"Prácticamente todo lo que habíamos hablado de lo que teníamos que hacer, lo hemos hecho. Han sido pequeños detalles, porque hemos hecho siete segundos menos que en el entreno", apuntó el esquiador aragonés.
"Las sensaciones han sido buenas, pero nos ha faltado el segundo entreno para haber acabado de afinar las líneas y tener las sensaciones de velocidad. Contábamos con hacer tres entrenamientos y al final sólo se ha hecho uno y en el primero estuvimos lejos del nivel al que tendríamos que haber estado", confesó.
"Hoy la velocidad ha sido mayor, nos ha sorprendido en algunas zonas y eso cambia la distancia que tienes que coger y los tiempos. Pero sin más", manifestó Galindo, que dijo que "no hay que poner excusas para nada".
"Hay que felicitar al resto que también entrena y compite y tenemos que estar contentos y satisfechos porque el tiempo que hemos hecho ha sido el mismo que hizo el mejor de los entrenamientos en nuestra categoría. Nos hemos quedado cerca, pero bueno, en el deporte son detalles los que marcan los éxitos", señaló.
Galindo se emocionó al destacar que este Descenso de PyeongChang ha sido el "último" de la pareja "probablemente".
"De continuar un año más no sería en pruebas de velocidad, así que estamos un poco con nostalgia de dejarlo pero contentos. No es obligatorio estar en el podio. Esperamos dar el pasito que nos queda", comentó.
La pareja española no acudió la noche anterior a la ceremonia de inauguración para descansar y afrontar con garantías esta carrera.
"Anoche cuando España desfilaba nosotros ya estábamos en la cama. Cenamos a las siete, a las ocho estábamos en la habitación y a las nueve los dos en la cama", desveló.
"Es una pena no haber desfilado pero te condiciona mucho el descansar poco. No sólo para hoy sino por la acumulación de días que hay detrás. Creo que fue la mejor decisión. Hemos venido a competir y es algo que teníamos que hacer para estar bien", subrayó.