Un malagueño en las entrañas del Shanghái Shenhua chino

De Marbella a China. De la UD San Pedro al Shanghái Shenhua, uno de los clubes más potentes del gigante asiático, que se asienta en la ciudad más grande del país y una de las más pobladas del planeta con 23 millones de personas. Es la aventura de Jaime Molina (Estepona, 1969), que se enrola en las filas del club chino para fortalecer su cantera tras más de una década de experiencia en los banquillos de España entre Segunda B y Tercera División. El 2019 trae uno de los retos más importantes de su trayectoria.

El entrenador malagueño pasó por el Marbella o por el Atlético Malagueño, filial del Málaga. Hasta hace unas semanas era el hombre señalado para salvar a la UD San Pedro, en el vagón de cola del Grupo IX de Tercera División. Una llamada lo cambió todo. "Surge desde el momento que mi ex compañero y amigo está trabajando allí y me llama porque existe un puesto vacante, para preguntarme si me hace ilusión. Le digo que sí cuando me traslada las condiciones y el acuerdo y me aventuro a decirle que sí. Estamos ya embarcados en la faena", explica el protagonista. Al otro lado del teléfono estaba David Almazán 'Pirri', que fuera canterano del Barça y debutara en el primer equipo de la mano de Johan Cruyff. 

"Me he llevado una grata sorpresa con los jugadores, algunos podrían competir en División de Honor de España, tienen nivel suficiente"

El catalán llegó hace año y medio al Shanghái Senshua para ponerse a las órdenes del sub 16. Ahora dirige al sub 18 y pensó en Molina para completar su cuerpo técnico. "En un principio llego para hacerlo un poco más grande. Me encargaré de la faceta defensiva, de potenciar ese trabajo del equipo. Quiero ayudar en todo lo que pueda al club para potenciar la cantera", dice el entrenador malagueño. Este equipo es el cuarto en la estructura de la entidad. El primer equipo está en las manos de Quique Sánchez Flores y por debajo, en una estructura idéntica a la inglesa, aparece el reserva, el sub 19 y después el de Pirri. Los dos últimos juegan la misma competición, aunque en distintos grupos. 

Jaime Molina se marchará a China con su mujer, aunque ella viajará en marzo. Sus dos hijas, mayores de edad, permanecerán en España. Su ilusión es grande. "Quiero conocer cómo se trabaja allí, potenciar una cantera o un proyecto de cantera en el que China tiene que mejorar mucho. David Pirri lleva un año y medio lo está haciendo muy bien. Me atrae trabajar en un país fuera de España, están muy difíciles las cosas aquí y creo que es el momento para salir", dice, para profundizar sobre sus deseos: "Pretendo mejorar, solamente mejorar, Crecer como entrenador, es una experiencia también de vida. Ayudar al crecimiento de un fútbol que ahora mismo está en expansión. Tienen que mejorar, pero se está haciendo a pasos agigantados". 

El Shanghái Shenhua se desplazó este invierno a Marbella para comenzar a preparar la pretemporada. Su equipo sub 18 trabaja estos días también con buen clima, aunque en Valencia. Allí compiten con equipos de similar nivel. "La verdad es que ha sido sorprendente y me he llevado una grata sorpresa en la calidad de los jugadores, en el entendimiento del juego y te encuentras a muchos que podrían jugar en División de Honor en España, con nivel suficiente. Nos enfrentamos a equipos de División de Honor, también contra el Valencia, y las sensaciones son muy buenas", asegura Molina tras sus primeros días de trabajo en referencia a la calidad de la plantilla.

El técnico malagueño tiene claro qué puede aportar el entrenador español. "Sus conocimientos, entendimientos del juego. La experiencia que se ha visto clara a lo largo de estos años en cuanto a la mejor liga del mundo y eso atrae muchísimo. Somos muchísimos en España y ahora que nos aventuramos muchísimo más a salir, antes era más difícil", reconoce Jaime, que se muestra tranquilo al ser conocedor de la idiosincrasia del club chino: "Lo primero que me da confianza es que David Pirri venga a completar su equipo de trabajo. Después se añade que ellos son un club que tienen larga tradición en entrenadores españoles o hispanos, como Manzano o Poyet. El trato con respecto al entrenador es cercano, de respeto, familiar y eso también llama la atención".

En las entrañas de un titán asiático estará Jaime Molina, que da una zancada en su carrera. Por el Shanghái Shenhua pasaron futbolistas de la talla de Carlos Tévez o Nicolás Anelka. Ahora el cupo de foráneos lo engrosa Freddy Guarín y Obafemi Martins, este último con pasado en el Levante de LaLiga Santander. En los pilares bregará este malagueño.