Omar Ramos, aquel verdugo del filial
Hay jugadores que se quedan perennes en la memoria histórica de un equipo. A veces son héroes que luchan con tus mismos colores; otras villanos, enemigos que han hecho hincar rodilla a tu equipo en situaciones recordadas. Es la historia de Omar Ramos, rival clásico del Málaga en los últimos años con diferentes camisetas y nuevo refuerzo del Oviedo desde hace dos semanas. Omar estaba sin equipo, y la salida de Aarón Ñíguez del cuadro carbayón propició su fichaje.
El menudo jugador tinerfeño ya ha tenido participación en los últimos dos partidos con su nuevo equipo y estará enfrente en el regreso del Málaga a Oviedo una mayoría de edad después. Será la décima vez que se enfrente al equipo blanquiazul y con la cuarta camiseta tras hacerlo con el Tenerife, el Valladolid o el Leganés, su penúltimo club. Pero, como decíamos, algunos malaguistas recuerdan a Omar Ramos por una de sus faenas cuando era una de mayores promesas del fútbol canario.
Se enfrentaban en 2009 por subir a Segunda División B el Málaga B y el Tenerife B. Dos muy buenos equipos. Un filial blanquiazul con Portillo, Edu Ramos, Iván González, Javi López, Manu Torres, Orozco… Y un Tenerife en el que sobresalía Omar Ramos. Su eliminatoria fue soberbia. Y eso que en la ida, jugada en una atestada Ciudad Deportiva El Viso, el Málaga B del actual director de La Academia Rafa Gil vencía por 4-0. Pero los tinerfeños lograron llevar con vida la eliminatoria a la vuelta con dos goles en el tramo final (4-2).
Fue en aquel partido de vuelta en el Heliodoro Rodríguez López cuando Omar Ramos ajustició al filial marcando dos tantos decisivos, sobre todo el segundo, a cuatro minutos del final, y que darían el pase y el ascenso posterior al Tenerife B dejando al Málaga B en la estacada. Una década después de aquello Omar Ramos volverá a estar enfrente. Las vueltas del fútbol, imprevisibles.