El resurgir del coche #8 ha tenido en el español Fernando Alonso al gran protagonista, ya que de madrugada ha sido capaz de restar 90 segundos en algo más de cuarenta vueltas al coche #7, después de que éste, a los mandos de Conway, adquiriese una importante renta de 2:20 cuando Buemi ha sido sancionado con un pase por la línea de garajes por adelantamiento indebido.
Precisamente, Alonso tomará el relevo en breve de Buemi para cumplir son su tercer y último turno, en el que tendrá la responsabilidad de mantener o incrementar la cómoda ventaja que ha obtenido su equipo.
Fernando Alonso ha sacado lo mejor de sus conducción y tras una cuarentena de vueltas ha dejado a Kazumi Nakajima la oportunidad de en el siguiente relevo rematar el trabajo, como así ha hecho el japonés a partir de las cuadro de la madrugada, y finalmente Buemi ha subrayado el buen comportamiento del coche #7 para abrir la brecha un poco más a cada vuelta.
De esta forma, al llegarse a los tres cuartos de carrera, habiéndose corrido ya dieciocho horas y faltando seis para el banderazo a cuadros final, Toyota está en disposición de no solo hacer un doblete, sino ganar por primera vez en su historia las 24 Horas de Le Mans, y se mantienen estas posiciones, con Fernando Alonso en el coche ganador.
Toyota viene de vencer en Spa la primera semana de mayo en las 6 Horas, primera carrera con la que se inauguró el campeonato del mundo de resistencia.
A la estela de los dos Toyota, siguen en pie sobre el asfalto de La Sathe los dos Rebellion suizos, aunque a más de diez vueltas, mientras que los otros seis prototipos de la categoría LMP1 se encuentran perdidos en las últimas posiciones de la clasificación general, después de haber sufrido importantes averías o accidentes, mientras que tres de ellos hace horas que han quedado fuera de la carrera.