Fernando Alonso y Carlos Sainz: el duelo que España no podrá evitar
Decirle a los aficionados españoles a la Fórmula 1 que elijan entre Carlos Sainz y Fernando Alonso es colocarlos en un compromiso. ¿A quién quieres más, a papá o a mamá? El ídolo de vuelta y la gran apuesta de presente en Ferrari. Sin embargo, este Mundial que acaba de comenzar apunta a que llegará un momento en que haya que elegir. El Gran Premio de Baréin ha puesto sobre la mesa un escenario que ya se vislumbraba. Dos equipos lucharán por ganar tanto el Mundial de pilotos como el de constructores. Pero después habrá una lucha encarnizada por liderar la zona terrenal.
Ahí quiere regresar Ferrari. Y ahí quiere volver a estar Alpine. Los dos con un objetivo claro a batir: McLaren. Curiosamente, exequipo tanto de Fernando Alonso como de Carlos Sainz, quien dejó el color papaya a finales de 2020. Para ello, Alpine deberá mejorar más que Ferrari, a tenor de lo visto en el Circuito de Sakhir. Tuvo problemas a nivel de baterías, frenado trasero y refrigeración del motor. Pero no es un camino cerrado, el margen de mejora es notable. Tanto Alonso como el propio equipo avisan de que habrá un progreso sensible en las próximas carreras. Primero tienen que dejar atrás a Aston Martin y AlphaTauri. Luego, no perder comba con Ferrari.
El caso de Carlos Sainz es menos espinoso que el de Fernando Alonso. La mejoría respecto al año pasado es constatable. Ferrari fue el equipo que menos tiempo perdió respecto al año pasado en dicho circuito. El SF21 ya no tiene los problemas de potencia de su antecesor. Y tiene a los mandos a un piloto, el español, que promete llevar esa mejora hasta el límite. Aunque en Baréin dejara puesto el freno de mano de la precaución. Este miércoles ya estaba de nuevo manos a la obra con el simulador en Maranello.
Ferrari está cerca de McLaren, indiscutiblemente ahora mismo el favorito para ser tercero. Alpine no está lejos de los monoplazas rojos. Carlos Sainz y Fernando Alonso tienen margen de mejora en sus coches. La batalla está servida. Ver un duelo fraticida en este Mundial será maravilloso, aunque haya que elegir entre mamá y papá.