Tras casi 400 carreras en Fórmula 1 después, no cabe duda de que Fernando Alonso es un piloto con alma de ingeniero. El asturiano sabe de las carencias del AMR24, pero también de sus puntos fuertes, y por ello trató de esconderlos hasta la última vuelta de la clasificación, donde se jugaba su puesto en la parrilla de la carrera, para no dar ni una sola pista a sus rivales. En Código F1, de DANZ, mostraron cómo el bicampeón del mundo se las ingenió para esconder la alta velocidad de Aston Martin a una vuelta.
Fernando Alonso no dio ni una sola pista en las tres sesiones de entrenamientos libres de lo rápido que era Aston Martin a una vuelta en el circuito de Jeddah, para ello, usó la técnica del clipping. En Fórmula 1 entendemos como clipping cuando un monoplaza llega a la parte final de una recta y lo hace sin entrega de batería -al haber usado esta durante toda la vuelta- y por lo tanto no alcanza la máxima velocidad que le permite el motor en ese punto. Para conseguir llegar a ese punto basta con revolucionar menos de lo normal el motor o poner un modo de ahorro de motor, y eso fue lo que hizo el piloto asturiano.
En otras palabras, consiste en hacer la vuelta menos rápida de lo que permite en realidad el monoplaza con el objetivo de intentar aparentar menor velocidad antes de llegar a la Q3 de la clasificación, donde ya no se puede esconder nada y todo es fuego real. Como apuntan los compañeros de DAZN, esta técnica se puede ver tanto escuchando los motores a final de recta, como observando la telemetría de dos coches, uno que no hace clipping y otro que sí lo hace.
Con dos carreras disputadas, ya no cabe duda de que el AMR24 es un monoplaza muy rápido a una vuelta pero que sufre en carrera por la alta degradación de los neumáticos.
Dice ser piloto, pero estamos seguros de que dentro esconde a un ingeniero 🧠
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— DAZN España (@DAZN_ES) March 11, 2024