Fernando Alonso puede ver la luz al final del túnel. Tras encadenar varios Grandes Premios algo negativos y con la disputa de la carrera en Canadá a la vuelta de la esquina, el piloto asturiano puede sonreír al ver la reglamentación que se implementará a partir del 2026. Unos cambios que, según la FIA, quieren dar más 'poder' al piloto. Premiar el don al volante es una premisa que Alonso puede aprovechar a las mil maravillas, y es que el español tiene una capacidad sobrehumana más que demostrada.
"Carrera tremendamente aburrida. Solo hay una pequeña esperanza, que es la parada. Cuando quitas esa parada con una bandera roja la cosa ya es dramática. Hemos cambiado varias veces el cambiar esa regla, que con bandera roja no se puedan cambiar neumáticos. Hoy, saliendo atrás, he tenido una carrera muy aburrida. Estos dos fines de semana han sido cruciales para entender nuestras debilidades. En estas carreras estamos aprendiendo mucho para lo que queda de año, el 2025 y el 2026. Ha sido un toque de atención muy grande", destacaba el propio Alonso al término del Gran Premio de Mónaco.
Uno de los cambios más importantes que se ven a simple vista tiene que ver con la ergonomía de los monoplazas. En ese sentido, hay uno que destaca por encima del resto y que ya ha hecho a los 'alonsistas' ilusionarse con ese 2026. El nuevo alerón que tendrán los coches de F1 en dos temporadas crean un curioso 'deja vu' en clave Alonso y Renault.
Y es que con las fotos proporcionadas por la FIA y tirando un poco de hemeroteca, uno se da cuenta que el Renault con el que Alonso ganó sus dos títulos guarda un interesante parecido a los que vendrán en 2026. Es un detalle y seguramente existan muchos otros detalles que 'tiren' por la borda toda esa ilusión, pero la realidad habla por sí sola.
A modo resumen, la 'nueva' F1 traerá en 2026 cambios muy importantes y que están agrupados en estos puntos: