McLaren y la 'maldición' de su hospitality: del incendio en Montmeló al cierre durante el GP de Hungría

El hospitality de McLaren ha vuelto a ser el centro de todas las miradas. Durante la tarde de este pasado miércoles, una inesperada tormenta de verano azotó fuertemente las instalaciones del paddock de Hungaroring. Mientras todos los equipos trabajaban para dejar listos los boxes, motorhomes y demás, la meteorología intuyó que era un buen momento para hacer acto de presencia. Lluvia, mucho viento y hasta granizo. Esto último fue lo que provocó que McLaren sufriera un nuevo revés. Más allá de lo puramente deportivo, donde los 'papayas' está siendo una auténtica sensación, su hospitality continúa una particular maldición. Primero fue en Montmeló; ahora, en Hungría. Tan duramente golpeó la tormenta que en McLaren se han visto obligados a cerrar su hospitality durante todo el Gran Premio.

"El miércoles por la tarde, durante los preparativos para el GP de Hungría, el equipo se vio afectado por un imprevisto meteorológico que ha afectado al McLaren Team Hub. El equipo está trabajando actualmente para reparar los daños y, por lo tanto, desafortunadamente, nuestro Team Hub no estará abierto a ningún invitado ni a los medios de comunicación durante el GP de Hungría", comenta McLaren en un comunicado oficial. Pero no solo los británicos han sufrido los efectos de la tormenta. Un camión de Red Bull también estaba sumergido en el agua a raíz del temporal.

McLaren: de Montmeló a Hungaroring

McLaren no está teniendo mucha suerte durante este 2024. Hace poco, en Montmeló, su motorhome sufrió un incendio que dejó hasta dos heridos leves. Ahora, tras la tormenta en Hungría, su zona parece ser la más dañada. Y es que las imágenes hablan por sí solas: una especie de granizo ha causado desperfectos en el techo del hospitality del equipo. Unos daños que imposibilitan hacer una 'vida normal' durante los próximos días por seguridad.

La tormenta de verano azotó el Gran Premio de Hungría antes ni siquiera de empezar a rodar. Pese a que se vivieron momentos de mucho nerviosismo, se prevé que no vuelva a suceder, ya que el parte meteorológico para estos próximos días nada tiene que ver con la lluvia, el viento o el granizo. Es más, la previsión dicta todo lo contrario: se espera mucho sol y altas temperaturas, por encima de los 30 grados. Una cifra que incluso podría influir en la estrategia de carrera para el domingo.