Jorge Prado y la historia detrás del campeón de motocross: de tener que emigrar a pasar el covid dos veces
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ElDesmarque charla con Jorge Prado, campeón de motocross
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El piloto de Lugo nos narra su historia vital
ElDesmarque ha estado con un auténtico campeón del mundo, Jorge Prado, que nos ha atendido tras proclamarse campeón del mundo de motocross ¡El primer español en hacerlo! Más allá del aspecto deportivo, el piloto de Red Bull tiene una gran historia de superación.
Ser campeón del Mundial de Motocross es un sueño que Jorge Prado tenía desde pequeño y que lo ha podido hacer realidad. El piloto gallego nos explica que con con tan solo tres años se subió por primera vez a una moto, que por cierto, era más grande que él. Se la regaló su padre, Jesús Prado, también piloto de motocross y al que muchos aficionados a esta disciplina del motociclismo recordarán.
Jorge Prado ha hecho historia para el motociclismo español
Jorge Prado narra lo duro que fue tener que emigrar a Lommel, en Bélgica, con parte de su familia, sus padres y su hermana pequeña, y dejar en España a sus abuelos y amigos de la infancia. Nos explica como tuvo que aprender holandés e inglés para poder integrarse con tan solo 11 años y lo difícil que fue hacer nuevas amistades.
La decisión de marcharse a Bélgica tenía razones de peso y es que este país siempre ha sido un un buen centro de Motocross, y con mejores condiciones que las que podría haber tenido en España. Su padre cambió su trabajo en un banco por una fábrica y trabajos de fin de semana en verano, y su madre dejó la abogacía para trabajar en una heladería.
El campeón de motocross vive ahora entre Bélgica y Roma. "Es un orgullo poder abrir camino a los jóvenes españoles para que se dediquen al motocross", nos cuenta. A modo de anécdota, el piloto de Red Bull nos cuenta que cuando fue campeón del mundo hace unas semanas no se dio cuenta porque no leyó la pizarra y fueron sus familiares los que le dijeron que había ganado el campeonato del mundo.
Para lograr ser campeón del mundo, Prado ha pasado por muchas adversidades, como pasar el coronavirus dos ves, un camino duro pero que ha tenido una gran recompensa.