Dani Pedrosa vive un último Gran Premio de ensueño con homenaje y paseo a hombros

Dani Pedrosa es leyenda del motociclismo nacional e internacional. El barcelonés se retiró en 2018 y entró en el salón de la fama de la FIM (Federación Internacional de Motociclismo), y poco después se convirtió en piloto probador de KTM. El equipo ha evolucionado enormemente de su mano, y se lo ha querido agradecer ofreciéndole un último baile delante de su afición española, en Jerez, y Dani no ha decepcionado.

Un regreso de nivel para Dani Pedrosa

Porque Dani Pedrosa no ha vuelto solo a pasearse. Quería brillar, volver a sentirse piloto y terminar su carrera con una fantástica sensación, y las cosas no han podido salir mejor. Ya desde el viernes sus fans se deleitaban con su conducción, liderando la tabla de tiempos de los primeros libres. KTM tiene una buena moto y el 'pequeño samurái' es talentoso como pocos. Pese a llevar años fuera de la competición, él sigue ahí.

En la clasificación logró el sexto mejor tiempo, y quedó séptimo tanto en la carrera al Sprint como en la carrera larga del domingo. "Yo le pondría una nota muy alta. Un 10 porque al final todo ha ido muy bien", afirmaba Dani Pedrosa sobre su actuación durante el fin de semana.

"La velocidad estaba ahí, en el intento a una vuelta nos desenvolvimos muy bien, nos clasificamos directos a la Q2. Han pasado cosas muy buenas, quizás en la carrera sí que han faltado detalles para estar un poco más espabilado. Yo lo que he notado que el viernes me encontraba mucho más fresco, despierto, con chispa. Ya el día dos me noté un poco más apagado en cuanto al sistema nervioso. Y hoy ya me he levantado y he notado que no tenía tanta chispa como el primer día. Quizás no me ha dado tiempo por la noche a recuperarme y estar tan fresco, pero supongo que es algo normal al estar tanto tiempo fuera", señalaba el piloto catalán.

Aun así, Pedrosa aseguraba que se notó "bastante oxidado" frente a los jóvenes. "Mi velocidad era buena, pero mi agresividad estaba más oxidada y la de ellos estaba bien pulida. Por eso en las cuatro salidas que he hecho nunca he ganado posiciones, siempre perdí".

Homenajes y despedida "definitiva"

Estaban haciendo el 'Riders Fan Parade' cuando pasaron por la zona Nieto-Peluqui y los fans estallaban con Pedrosa. Tanto que tenían que parar para que el piloto de 37 años se bajase a saludar. Incluso Jack Miller lo subió a sus hombros.

"Ha sido una sensación bestial este fin de semana con la gente, pero no sólo con la afición que me ha apoyado muchísimo. En el 'Rider Fan Parade' casi me pongo a llorar cuando estaba en la zona de Nieto-Peluqui; pero luego los pilotos también me han apoyado muchísimo. Entiendo que es difícil a la vez estar compitiendo y apoyar a otro piloto, pero ha sido muy bonito por su parte también", comentaba Pedrosa.

Por último, ante un posible regreso en Misano, alimentado por su gran nivel en esta carrera, Dani Pedrosa deja la puerta casi cerrada: "Yo estoy muy contento con lo que ya he hecho y hay que dejar el sitio para los jóvenes que es su momento. Yo ya lo he disfrutado mucho y como aquí no va a ser mejor. Espero que podamos seguir evolucionando la moto y si hay que hacerlo, lo valoraremos si fuera necesario".