Las dudas de Marc Márquez durante la carrera en Assen: de dejar pasar a rivales a tocarse con Bastianini

No ha sido el mejor fin de semana para los intereses de Marc Márquez. El piloto catalán del Gresini Racing, que la próxima temporada estará en el equipo oficial de Ducati, ha protagonizado un Gran Premio de Assen bastante plano. Si bien su presencia en las primeras posiciones ha sido siempre la tónica a seguir, la realidad es que ha estado alejado del podio. Con la ausencia de trofeo en este fin de semana, ya encadena dos Grandes Premios -Mugello y Assen- sin subir al podio. Aún así, Márquez ya es consciente de cuál es su rol hasta que termine la temporada: luchar por podios, alguna victoria y seguir disfrutando.

"¿Podio? No. Y menos viniendo de una caída. El objetivo positivo y optimista es estar en ese 'top5'. Vengo de dos caídas en dos vueltas. Tengo que coger mañana un poco de confianza en mis minutos en el 'warm up'. Luego, en la carrera, ir cogiendo confianza. ¿Se puede volver a caer? Sí, porque esto pasa. Son carreras y si no no te expongas, pero intentaremos hacer una buena salida, pero hay tres pilotos que, de momento... en entrenamientos eran dos, pero en la sprint se ha visto que también Martín saliendo bien, saliendo delante, es capaz de engancharse y mantener el ritmo", pronosticaba este sábado.

Marc Márquez y sus dos acciones en carrera

Durante la carrera, Márquez ha sido protagonista de varias acciones. La primera de ellas, con Fabio Di Giannantonio. Mientras el catalán defendía la tercera posición, Márquez no dudó, en un punto del circuito, en dejar pasar al piloto italiano del VR46. Las teorías son varias, pero la que coge más fuerza (a falta de que él mismo la explique) es la relacionada con la presión de los neumáticos. Al tener a Pecco Bagnaia y Jorge Martín a una distancia más que importante, la estrategia de Márquez para no forzar tanto los neumáticos fue la de dejar pasar a DiGia y, así, poder calentarlos como era debido. Al final, pudo terminar por delante suya, en cuarta posición.

Y terminó cuarto por Enea Bastianini. El italiano de Ducati, el que actualmente lleva la moto que usará Marc en 2025, no dudó ni un instante cuando se le presentó la ocasión de adelantar al catalán. Eso sí, lo hizo rozando los límites de lo legal. Tras la recta de meta de Assen, en la curva uno, Bastianini le metió la moto Márquez, hasta lo sacó de la trazada tocándose levemente. Una situación que noqueó por completo las aspiraciones de podio para un Marc que sigue tercero en la clasificación general.