Marc Márquez vuelve a ser protagonista después de ganar las dos últimas carreras de MotoGP en Aragón y San Marino. El de Cervera ha vuelto a lo grande a lo más alto de la competición y se ha convertido en un rival a tener en cuenta para Pecco Bagnaia y Jorge Martín. Tras sus últimos éxitos, Valentino Rossi ha querido volver a rescatar su rivalidad provocada por la famosa patada que protagonizaron ambos. El expiloto italiano le ha atacado en el podcast de un amigo y ha revivido esa guerra que tuvieron los dos hace casi diez años. Algo que no ha sentado bien en su entorno pero que él no ha querido dar más importancia.
Márquez ha enterrado el hacha de guerra de la mejor manera posible, ignorando por completo las declaraciones de Rossi y siguiendo a lo suyo. “Lo he escuchado y vi el vídeo… bien. Ahora mismo tengo cosas mucho más importantes en mi cabeza. Mi faena ahora está sobre la pista, soy un piloto en activo, así que ni me interesan ni me afectan esas guerras. Ya he pasado por todo, y sé dónde debe estar mi cabeza. Nadie me despistó en el pasado ni lo hará en el presente”, sentenciaba Márque en la rueda de prensa previa al GP de Emilia-Romagna.
El italiano fue muy duro recordando su rivalidad cuando todavía era piloto. "Es un piloto muy fuerte, un campeón. Siempre ha ido bastante límite, muy agresivo, pero en 2015 cruzó la línea. Si eres malo deportivamente o agresivo, hay muchos que rozan lo sucio y te podría poner muchos ejemplos, pero ninguno entre los campeones del Motor ha luchado jamás para hacer perder a otro piloto, eso es lo que marca la línea. Generalmente, los que hacían ciertas cosas lo hacían por sí mismos, eran sucios para sacar ventaja, porque querían ganar. Nunca nadie ha sido tan sucio como él", afirmó Rossi en el podcast Mig Babol.
valentino rossi imita marc marquez incazzato per non averlo buttato giù all’ultima chicane assen 2015 pic.twitter.com/KFAlCaiAx7
— ludovica | milan n2 (@bejeweludi) September 11, 2024
Incluso fue más allá y le acusó directamente de hacerle perder el Mundial de 2015. "Intentó hacerme caer tres o cuatro veces y, afortunadamente, no me caí. Me acerqué mucho a él y lo miré para decirle: 'Basta, ¿qué c*** estás haciendo?'. Sólo que nos tocamos. No quería tirarlo, pero se cayó. Me hizo perder el Mundial, también porque luego me hicieron salir último en Valencia", destacó.