Los hermanos Márquez nos han regalado una auténtica batalla por la victoria en la carrera del GP de Argentina de MotoGP. Marc Márquez y Álex se han disputado durante las 25 vueltas el triunfo en Termas de Río Hondo, en un duelo en el que el mayor ha salido triunfante.
Marc había sido el más rápido durante todo el fin de semana y quería completar su segundo pleno de la temporada, pero Álex no se lo pondría nada fácil. El pequeño lideró durante 16 giros. Franco Morbidelli les acompañó en el podio.
Arrancaba la carrera con una mala salida del tercer clasificado, Johann Zarco, que daba la opción a Pecco Bagnaia de meterse en las tres primeras posiciones. Entre el italiano y el francés se desataría una guerra durante las primeras vueltas a la que se sumaría después Franco Morbidelli. A lomos de la Ducati VR46, el #21 adelantaba en la tercera vuelta a los otros dos competidores por el podio.
La pugna por el tercer lugar dio margen a los hermanos, que desde los giros iniciales pusieron más de medio segundo de diferencia con sus perseguidores. Lejos de tener una relación de fraternidad, en la vuelta 4 Álex 'declararía la guerra' al mayor de los Márquez. Marc se 'colaría' en la curva 1, dejando mucho espacio por el interior y el #73 lo aprovecharía para ponerse líder de la carrera.
En Tailandia, el ocho veces campeón del mundo dejó pasar a su hermano para imponerse en las últimas vueltas, pero esta vez no parecía ser parte de la estrategia. Marc apretaba en cada vuelta aunque protegiendo sus neumáticos -con la batalla con Valentino Rossi en este mismo escenario en la retina-.
En el ecuador de la prueba, Álex y Marc Márquez distanciaban en más de 1 segundo a Morbidelli, que resistía en el último cajón del podio. En apenas cinco giros más, la diferencia había escalado hasta los 2,5 segundos. La velocidad de los dos catalanes era tremenda y el del 'primer equipo' de Ducati, que iba al límite, estuvo a punto de irse al suelo en la vuelta 15.
El primer gran intento del #93 por pasar a su hermano llegó a falta de siete vueltas. Aprovechó una curva para meterse por el interior, pero no pudo continuar con una buena trazada y Álex recuperó rápidamente el liderato.
No parecía llegar para ellos el desgaste de las gomas y firmaban poco después los mejores ritmos. Si el menor pasaba en 1:38:3, Marc respondía bajando una décima y demostrando que ambos querían la victoria.
En la vuelta 20, llegó el sorpasso. El ex de Honda impuso su superioridad de ritmo para adelantarle en la larga recta del circuito. Intentaba reaccionar el de Gresini, pero Marc puso la directa y sentenció rápidamente la victoria, llegando con más de un segundo de diferencia.