Leo Messi se acordó de Johan Cruyff este fin de semana al emular al holandés en el penalti que lanzó ante el Celta. El argentino tocó ligeramente el balón hacia delante para que Luis Suárez la empujara a gol como hiciera el exjugador del Barcelona con su compañero en el Ajax Olsen.
Pero no fueron los únicos que quisieron ejecutar de manera diferente el lanzamiento de la pena máxima. Sócrates, Panenka, Pirés, Henry, Jokinen o Diab no dudaron en su momento de ser innovadores o de emular a mitos o leyendas que lo hicieron antes que ello, con mejor o peor resultado.
El resultado de estos lanzamientos siempre está lleno de debate, de si conlleva falta de respeto o no por el resultado o de si verdaderamente era necesaria dicha ejecución. Lo que está claro es que el espectáculo es el que gana, aunque mejor si sale bien.