Los supermercados se han convertido en uno de los pocos lugares abiertos durante la cuarentena por el coronavirus. Con algunas restricciones de aforo y horarios, los establecimientos mantienen unas medidas de prevención para evitar el contagio, aunque aún después de un mes de cuarentena existen ciertas dudas en cuanto a la higiene al hacer la compra.
Lavarnos las manos al regresar del supermercado es algo de gran importancia aconsejado desde el primer día. Con agua y jabón o con gel desinfectante, es importante lavarse bien después aunque se hayan utilizado guantes y mascarilla antes de tocarse la cara.
La gran duda, eso sí, aparece en torno a la posible desinfección o no de los alimentos que llevemos a casa en la compra desde el supermercado. Según la científica Marta Hugas, en una entrevista para La Razón, "no hay pruebas de que los alimentos o envases sean una fuente o vía de transmisión del coronavirus".
Lo cierto es que hasta la fecha ningún contagio se habría producido a raíz de los alimentos, pero esto no quita que debamos seguir teniendo medidas de higiene con ellos. Como lavarse las manos antes de empezar a manipularlos o cada vez que cambiemos de tocar alimentos crudos a otros ya cocinados.
En los últimos días hemos visto también que no todo vale a la hora de ir a hacer la compra. La Policía también está multando a algunos ciudadanos que camuflan el ir al supermercado con cualquier otro tipo de actividad.
Como casos de sirven de ejemplo nos podemos encontrar a la Policía Local de Punta Umbría y su multa a personas que sólo iban "a comprar cerveza". O la que se llevó un ilicitano que salió "a por nocilla", un día después de caminar por la calle sin justificación.
El futbolista del Real Valladolid Pedro Porro también se llevó una multa al coger su coche para ir a un supermercado a 14 kilómetros de su domicilio.