El plan del Gobierno para la Navidad: límites en reuniones, toque de queda...

Se acerca la Navidad y la incertidumbre alrededor de las Fiestas que se aproximan sigue creciendo. Los gobiernos territoriales intentan frenar la curva de contagios por COVID-19 y ante las últimas previsiones, el Gobierno central ya ha redactado el que será el plan del mismo para los festivos: limitaciones en reuniones, levantamiento de toque de queda...

El Gobierno ya tendría preparado el plan sanitario para la Navidad y habría preparado, punto por punto, las principales preocupaciones de la ciudadanía. El borrador, al que ha tenido acceso El Mundo y ha publicado este martes, ha sido apodado como Propuestas de medidas de salud pública frente a la Covid-19 para la celebración de las fiestas navideñas, y ha sido elaborado por el Ministerio de Sanidad para compartirlo/debatirlo con las comunidades autónomas durante las siguientes fechas.

En ElDesmarque repasamos los principales puntos del mismo:

• Limitación en las reuniones: el Gobierno aboga por “recomendar” cenas/almuerzos limitadas a “miembros que pertenezcan al mismo grupo de convivencia”, permitiendo que, si existen algún miembro externo, las reuniones sean -como máximo- de seis personas.
• Confinamiento/toque de queda: se mantendrá como hasta ahora (marcado por las comunidades autónomas) excepto los días 24 y 31 de diciembre, que se ampliará el horario hasta las 01.00 horas.

Además de las mencionadas, el Gobierno realiza varias recomendaciones tales como evitar las “reuniones en ámbito social” como celebraciones del trabajo, reencuentro de antiguos alumnos o comidas deportivas, evitar “viajes que no sean estrictamente necesarios” y a los estudiantes que se encuentran lejos de casa se les invita a minorizar las interacciones sociales los días previos a la vuelta a casa, además de, una vez que lleguen a sus domicilios habituales, limitar los contactos e interactuar siempre con mascarilla y, preferiblemente, al aire libre.

Estas medidas, igualmente, pueden ser reestructuradas o modificadas por las autonomías, que serán las que tengan la última palabra en sus respectivos territorios.