Mike Tyson y los diez grandes regresos en la historia del deporte

Adiós. Cuesta tanto pronunciar esta palabra que cuando la entona un deportista muchas veces no significa algo definitivo. Menos aún cuando se trata de una leyenda. La despedida de una gran estrella supone un vacío emocional para millones de aficionados, que vuelven a ilusionarse en cuanto se produce el ansiado regreso, sobre todo en casos de retiradas prematuras. La del boxeador Mike Tyson no fue temprana y su vuelta no se ha producido en un contexto oficial. Sin embargo, ha despertado el gen competitivo de la bestia, que ya quiere pelear otra vez. Lo mismo insinúa otro gran exboxeador: Evander Holyfield. Y no se queda atrás la gran referencia en España: Poli Díaz.

Pero este capítulo firmado por Tyson da pie a recordar grandes regresos de deportistas célebres. Los hay de todos los colores, pero podemos quedarnos con diez de ellos a modo de muestra.

Muhammad Ali. Hablando de Tyson, el boxeo vivió con enorme expectación la vuelta del más legendario de todos los púgiles. Ali estuvo primero tres años alejado de los cuadriláteros tras negarse a acudir a la guerra en Vietnam y ser sancionado. Regresó en 1970 con 28 años y ganando (sólo sufriría dos derrotas antes de su declive final). Más tarde, tras haber anunciado su jubilación con la venganza sobre Leon Spinks, intentó volver. Lo consiguió, pero sólo pudo manchar su hoja de méritos: dos derrotas en 1980 y 1981 con casi 40 años.

Tiger Woods. Es considerado uno de los mejores golfistas de la historia. Arrasaba con todo hasta que un escándalo personal y las lesiones le apartaron de la cúspide. En 2009 Tiger estaba hundido. Adicto al juego, al sexo y al alcohol, divorciado de su esposa y abandonado por sus patrocinadores. El americano se recluyó durante un año, superó sus adicciones, se entrenó para paliar sus problemas de espalda y volvió al circuito profesional. En 2019 se enfundó su quinta chaqueta verde del Masters de Augusta. Era su 15º grande, 11 años después del último y 22 después del primero.

Michael Jordan. ¿Qué decir del mejor jugador de la historia del baloncesto? Jordan anunció su sorpresiva retirada en 1993, dejando al mundo boquiabierto. Dos años después, publicó su famosa carta: "I'm back". Lideró a los Chicago Bulls a tres nuevos anillos de la NBA. Hubo tiempo para un nuevo retiro provisional: desde 1999, cuando se desintegró aquel legendario equipo de Chicago, hasta 2001, cuando se integró durante dos temporadas en los Washington Wizards, club del que era accionista. Esta última etapa no aportó nada destacable a su magnífico historial como jugador, aunque sus promedios no fueron nada malos. En 2003 Jordan se convirtió en el primer jugador de la NBA en anotar 40 o más puntos con 40 años.

Michael Phelps. Es el mejor deportista olímpico de todos los tiempos: 28 medallas (23 de oro). Tras batir todos los récords posibles en los Juegos de 2012 (Londres) anunció que no volvería a competir. Pero el americano subestimó la adicción que produce la máxima competición y regresó en 2014. Su objetivo no era otro que ir a los Juegos de 2016 (Río de Janeiro) y ampliar su colección de medallas. Obtuvo cinco oros y una plata. Ahí queda eso. Histórico.

Martina Hingis. La tenista suiza, hoy ya retirada definitivamente, sorprendió al mundo a mitad de la década de los 90. Con tan sólo 17 años conquistó Roland Garros. Pero tras varias lesiones crónicas y graves en los ligamentos de los pies, se retiró en octubre de 2002 con 22 años. Había conquistado cinco Grand Slam y había jugado otras siete finales. Regresó en 2006 con discreto éxito, para colgar la raqueta un año después tras un positivo por cocaína. En 2013 la descolgó para dedicarse a los partidos de dobles, modalidad en la que triunfó: diez Grand Slams, número uno del ránking mundial y plata olímpica en Río de Janeiro 2016.

Michael Schumacher. Otro Michael. Otra leyenda. En este caso de la Fórmula 1. El piloto alemán se retiró con 37 años en 2006, tras 16 temporadas en la Fórmula 1 y siete Mundiales. Se quedó como piloto probador de Ferrari y estuvo a punto de sustituir al lesionado Felipe Massa en 2007. Sin embargo fue en 2010 cuando, de la mano de Mercedes, regresó a la parrilla. Fue una vuelta discreta la del kaiser, quien no por ello sigue teniendo un palmarés reluciente.

Dara Torres. La nadadora estadounidense se retiró por primera vez tras los Juegos Olímpicos de Barcelona en 1992 con cuatro medallas en sus vitrinas. Su regreso al agua fue tremendamente meritorio, ya que sucedió ocho años después. Como hiciera años más tarde el ya mencionado Phelps, Torres se colgó cinco medallas más en Sidney 2000 para después volver a anunciar una nueva retirada. Pero tampoco esta fue definitiva: ¡otros ocho años después regresó en Pekín 2008! La estadounidense añadió tres medallas más a su palmarés y se retiró tras haber participado en cinco ediciones diferentes los Juegos Olímpicos y colgarse 12 medallas.

George Foreman. El mundo del boxeo es propicio para regresos estelares. Ni Tyson ni Ali. El de Foreman fue el más espectacular. Su vuelta a la competición oficial fue de las más triunfadoras de la historia del deporte. Foreman participó de la época dorada del boxeo junto a Ali y Joe Frazier. Tras retirarse en 1977 y permanecer como reverendo eclesiástico un decenio, decidió volver al ring con 38 años. Pero es que recuperó el cinturón de campeón del mundo con 45 años, en 1994. Siguió peleando hasta 1999, firmando una de las páginas más impresionantes de la historia del deporte.

Magic Johnson. Otra estrella de la NBA que volvió a las pistas de manera triunfal. El americano se apartó del baloncesto debido a su enfermedad (VIH) en 1991. A pesar de su recordada participación con el 'Dream Team' en los Juegos Olímpicos de Barcelona (1992) y un breve intento en la temporada siguiente, se probó de nuevo en la campaña 1995-96, sorprendiendo a propios y extraños. Llegó a jugar el 'play off' (los Lakers cayeron con los Houston Rockets) y promedió 14,6 puntos, 6,9 asistencias y 5,7 rebotes.

Maradona y Pelé. Los dos grandes mitos del fútbol también deben ser incluidos en esta lista. El argentino fue sancionado por dopaje (cocaína) en 1991 pero encontró en el Sevilla FC el lugar ideal para regresar. Sus mejores años ya habían pasado, pero el mundo del fútbol agradeció verlo de nuevo en los terrenos de juego hasta 1997, con otra sanción por dopaje incluida en el Mundial de 1994. Por su parte, Pelé se retiró en 1972, aunque estuvo participando en amistosos de despedida hasta 1974. Rechazó innumerables ofertas para volver. Hasta que el New York Cosmos lo convenció en 1975. Jugó 64 partidos y metió 37 goles. El 1 de octubre de 1977, a los 36 años, Pelé se despidió definitivamente en un encuentro entre el Santos y el Cosmos, sus dos únicos clubes.

Fuera de las diez más destacadas queda la de Lance Armstrong. Un sí pero no en toda regla. Desposeído de todos sus grandes logros como ciclista al reconocer que hizo trampas, el insaciable americano, antes de su histórica sanción, quiso demostrarle al mundo en 2009 que todavía podía ganar el Tour de Francia. Había vencido en siete ediciones consecutivas, pero aquel año fue superado por el español Alberto Contador. Quedó tercero, pero fue también un podium anulado por la UCI, que borró de la historia no sólo sus míticos triunfos a partir de 1998, sino también el que hubiera sido un prodigioso regreso.