Fue una noche para olvidar la de un Clínicas Rincón que pagó los platos rotos de la derrota del Menorca Básquet en la primera jornada. Los hombres de Manolo Povea, por ejemplo, sumaron de manera colectiva -3 de valoración. Siete jugadores estuvieron en guarismos negativos en este apartado. Un 26% (9/34) en tiros de dos y un 19% en triples (4/19) evidencian que no fue precisamente el día del Clínicas Rincón.
El encuentro comenzó con un Menorca Básquet muy enchufado y que logró el primer parcial importante con el 13-2 de los primeros tres minutos y medio. Un triple del Clínicas serviría para mantener la esperanza viva y ayudar al equipo a introducirse nuevamente en partido pero una vez comenzado el segundo periodo, las esperanzas visitantes comenzaron a diluirse.
Los 22 puntos de diferencia al descanso no eran más que un aviso por parte de un Menorca Básquet que, pese a comenzar a rotar dando entrada a los hombres de banco, mantuvo el nivel ofensivo durante los últimos 20 minutos donde los parciales se sucedían para cerrar el marcador con 43 tantos de diferencia. Miguel Lorenzo (14 puntos y siete rebotes) fue el hombre más destacado.