Entró en ellos ganando por cinco puntos (72-77), pero ahí encalló y cuando intentó salir no pudo, entre el buen hacer del equipo rival y una dudosísima antideportiva a Tuty Sabonis a falta de 14 segundos cuando el equipo malagueño perdía por sólo un punto. Ahí se marchó definitivamente un encuentro en el que el magisterio de Ricardo Guillén (29 puntos, 9 rebotes y 36 de valoración) no fue suficiente.
16 puntos en sólo seis minutos del profesor canario hicieron volar de salida al Clínicas con 33 puntos en el primer cuarto (22-33). Se compensó con un mal segundo cuarto que dejaba equilibrio en el marcador (44-43).
Con igualdad se desarrolló la segunda mitad, en la que el Clínicas nunca le perdió la cara al partido. Salía Tuty, después Pozas, más tarde Pozas para acompañar a un Guillén sobrenatural, que sólo falló dos tiros para anotar 29 puntos, con cinco triples incluidos. Ahí tenía el partido el Clínicas a falta de tres minutos (72-77) pese al mal día de Dejan Todorovic. Pero demostró el cuadro local por qué marcha segundo y pelea por el ascenso directo a la ACB. Y quizá le faltó un poco de maldad al Clínicas para matar el partido, lo que no quita que se completara, quizá, el mejor partido de la temporada.