El fútbol no gana adeptos entre locos y mafiosos de la fiesta
La noche no prometía a pesar de se una función de cuartos de final. Actuaba el coro de Julio Pardo, la chirigota del Canijo y la de Cardenas, el Lacio y Peñalver. También se esperaba la actuación del cuarteto de Alcalá de Guadaira tras su buen pase de preliminar. Lo mejor de la velada llegaría al inicio, luego fue decayendo hasta acabar.
Con el coro de Julio Pardo 'La Trattoria' llegaría lo mejor de esta quinta sesión de cuartos. Se llenaba el Falla de nuevo de mafiosos creando una atmósfera muy italianizada. Desde la presentación estos mafiosos traen un auténtico espectáculo de voces y musicalidad. El coro de Carnaval, a veces, alcanza cotas que se salen de la fiesta, es el caso de este. En el primer tango hablan de la afición verdadera que el corista siente por la fiesta. Tango con mucha razón, a diferencia de comparsistas y chirigoteros, el corista, al final de Carnaval no tiene ni para arreglar la cocina. Y otro tango a los abusos que se producen en la cantera. Directo este segundo y con contundencia. Simpáticos los cuplés, gran estribillo y un popurrí, con mucha carga de crítica a la sociedad, y una musicalidad que embauca. Aspiran a lo máximo, como siempre.
Tras ellos llegaba la chirigota 'Los Psicolocos' de Peñalver, Barranco, Cárdenas y Camacho. Suben un peldaño estos chirigoteros. Han sabido leer bien el concurso estos 'locos'. Mejoran respecto a su pase de preliminares y pueden colarse en la pelea de una modalidad que aunque está muy disputada, no ha llegado al nivel de otros años. El pasodoble de estos chirigoteros volvía a sonar a Cádiz de inicio a fin. Sobre todo el primero con una homenaje a la caja y el bombo de Carnaval. El segundo es un buen pasodoble donde se critica que aún existan enfermos que no acepten el amor entre dos personas del mismo sexo. Letra muy trillada ya pero que está bien recordarla de vez en cuando en una sociedad que tiene aún muchos prejuicios. En los cuplés también suben el nivel estos chirigoteros, y además lo rematan con un buen popurrí. Ni que decir tiene que el grupo suena de categoría. Apostaba a que vuelven en semifinales.
El Canijo volvía con su clásico a estos cuartos de final. Dos pasodobles con el estilo inconfundible de este autor buscando la metáfora con el tipo. Aún así esta tanda de pasodobles no hace más que confirmar el bajón que ha pegado esta chirigota en este curso. En la presentación empezaban con una nueva cuarteta pero que volvía a no hacer reír del todo. Aunque en la tanda de cuplés se nota una leve mejoría, el repertorio vuelve a hacer aguas en el popurrí. Un popurrí con algunos cambios -como se esperaba- pero que no llega a conectar nunca. La virtud del Canijo siempre fue acertar con una idea que le dé juego durante el repertorio. El fútbol da para muchas cosas, pero quizá se vuelve muy pesado para llevar el repertorio entero de una chirigota. Se esperaba más de este autor. Aunque siempre hay que agradecerles que cada año intente hacernos pasar un buen rato con sus ocurrencias, su periplo, si es éste un concurso de repertorios, debería de acabar en esta fase.
También pasó por el Teatro el cuarteto de Sevilla 'Una noche de Perros' que tras la sorpresa de preliminares se quedó en eso. Un buen cuarteto que le vino un poco grande la fase de cuartos de final pero que llena de optimismo a la modalidad más complicada de todas.