El atleta nerjeño, Ouassim Oumaiz, de 20 años, consiguió este sábado un brillante vigésimo puesto en el Mundial de cross, celebrado en el circuito infernal de Aarhus, el más duro de la historia de los campeonatos con una mezcla de hierba, barro, arena y la durísima subida al techo del Museo de la Prehistoria. El ugandés Joshua Cheptegei y la keniana Hellen Obiri se proclamaron campeones absolutos.
El campeón de España se permitió el lujo de codearse con los mejores en los primeros kilómetros junto a su amigo Kiplimo. Al final se clasificó vigésimo, el mejor resultado español en los ocho últimos años. Fernando Carro fue el segundo mejor español, en el puesto 42, seguido de Hamid Ben Daoud (54), Ayad Lamdassem (66) y Juan Antonio "Chiqui" Pérez (79).
La dureza del circuito, con zonas de arena, barro, agua, hierba y sobre todo la rampa, de un 21 por ciento de desnivel, que sirve de techo al museo de la Prehistoria, seguida de una brusca bajada, alteraban las previsiones sobre el desenlace de las carreras.
Tras su brillante resultado, el malagueño explicó que su táctica consistía en "aguantar con ellos lo que pudiera" y se declaró contento con su resultado, el día en que cumplió 20 años. "Ha sido un poco duro. Mi táctica era salir con ellos (los africanos) y aguantar lo que pudiera. Aguanté dos vueltas y después dije voy a coger mi ritmo. Al final he terminado en el 20 y muy contento", comentó el campeón nacional tras la carrera, en la que el equipo español obtuvo el séptimo puesto.