El tenista gijonés, que se mantiene como el 64 mejor del mundo, no tendrá un oponente fácil con Joao Sousa. En todo caso, el asturiano intentará conseguir su primera victoria en un cuadro final de un Masters 1000, cerrando de paso con buen sabor de boca la primera parte de la temporada. Un comienzo de curso que no ha sido todo lo positivo que esperaba el asturiano, que en su proceso de adaptación a la élite ha perdido siete de los ocho partidos que ha disputado.
Así, Carreño se enfrentará al portugués en el primer partido y si gana se las verá con Gilles Simon. En tercera ronda podría encontrarse con Tomas Berdych.