Desde hace semanas, los municipios preparaban sus playas para la nueva normalidad debido a la pandemia de coronavirus. Muchas de ellas optaron por parcelar su arenal para mantener la distancia de seguridad. Sin embargo, estas normas no se están cumpliendo en algunas zonas, como por ejemplo en Sanxenxo, donde la indignación es total puesto que los bañistas se amontonan en la orilla en vez de hacerlo en las respectivas parcelas.
Para muchos el coronavirus ya parece cosa del pasado, pero ese error puede costar caro a corto plazo. Pese a que muchas personas respetan tanto las normas de distanciamiento social como el uso de mascarillas, otras muchas hacen caso omiso a ellas.
Algo así es lo que está sucediendo en Sanxenxo y que está provocando la indignación de los vecinos. El ayuntamiento de la localidad pontevedresa dividió la Playa de Silgar en 780 parcelas, estableciendo un aforo que oscilaba entre las 1.560 y las 2.340 personas. Una capacidad inferior a la de veranos anteriores como es lógico.
Sin embargo, el enfado llega al comprobar como son muchos los bañistas que no hacen ni caso de la normativa y que se agolpan en la orilla de la playa para estar más cerca del mar. Debido a ello, las redes sociales se han convertido en un hervidero de comentarios críticos contra aquellos que no respetan las normas, además de preguntarse dónde se encuentran los informadores de las playas y las personas encargadas de mantener el orden en las mismas.
Muchos son los que piden sanciones económicas para estas personas que han demostrado, en este primer fin de semana de julio, que carecen de esa responsabilidad personal tan necesario en estos momentos para que el verano se desarrolle con cierta normalidad.