La flota vizcaína peleará por retener la codiciada Copa Castro

La Copa Castro, la regata que hermana las localidades de Getxo y Castro, celebra una nueva edición este fin de semana. Las embarcaciones y tripulaciones más destacadas de las flotas vasca y cántabra competirán en una regata que data de 1907 y cuyo trofeo es uno de los más perseguidos en este tramo final de la temporada de vela. Esta prueba, una de las históricas, tendrá como máximo favorito al ‘Yamamay’ cántabro de Javier Gallo entre los cerca de 60 veleros participantes en la presente edición, los cuales competirán en las divisiones IRC, J-80 y First Class 8, optando al Trofeo de la preciosa Copa Castro solo los barcos de la división IRC.  
Los dos recorridos puntuables consisten en una regata en línea entre Getxo y Castro (15 millas, el sábado), mientras ya el segundo será la regata técnica con un triángulo en aguas de Castro Urdiales (12 millas). El horario de salida de ambas pruebas será a las 13.00 horas. Este evento está organizado por el Real Club Marítimo del Abra - Real Sporting Club y el Real Club Náutico de Castro Urdiales, bajo los auspicios de la Real Federación Española de Vela y la colaboración de Promociones de Bizkaia.

La Copa Castro es un caso único, ya que se trata de un trofeo donado por todo un pueblo -Castro Urdiales- y adquirido por suscripción popular entre sus vecinos. Realizado en plata maciza, no ha quedado constancia del precio pagado en aquella época, a principios del siglo pasado, aunque la belleza de sus formas ha sido destacada a lo largo de los años por quienes la han podido conquistar. La desaparición del trofeo, en 1973, durante el incendio de la sede del Real Club Marítimo del Abra, pareció marcar el definitivo final de esta ya centenaria regata. Pero la iniciativa de los máximos responsables del R.C.M.A.-R.S.C. permitió recuperarla. En primer lugar fue la regata, que volvió a disputarse a principios de la década de los noventa y, después, ha sido el propio trofeo, del que en 1999 se realizó una réplica idéntica a la donada por el pueblo de Castro en 1908, cuyo valor es de aproximadamente 6.000 euros.