Las directivas de ambos clubes han tratado de enfriar los ánimos a lo largo de los últimos días lanzando mensajes tranquilizadores para ambas aficiones con el fin de intentar que el encuentro discurra exclusivamente por cauces deportivos. La directiva gualdinegra pidió disculpas públicamente por las agresiones verbales dirigidas en Lasesarre al entrenador murciano, Íñigo Saenz, mientras que el propio técnico y el presidente del Águilas han animado a los seguidores del Barakaldo a desplazarse garantizándoles un buen recibimiento. Habrá que ver si las palabras no se las lleva el viento y surten efecto.
De momento, el Barakaldo estará arropado en El Rubial por más de medio centenar de aficionados vizcaínos que se han desplazado a Murcia en el autobús fletado por el club que preside Alberto Roberto. En el plano deportivo, Iñaki Zurimendi recuperará a Jon Ander Garrido, sancionado la pasada jornada, y contará con la baja de David Camino, expulsado en el choque de ida.