La triatleta guipuzcoana ha vuelto por la puerta grande, y tras proclamarse Campeona de España de Triatlón de Invierno hace unas semanas, prepara con mimo su puesta a punto para la exigente temporada.
- Cuarta en 2011, segunda en 2012… ¿crees que 2014 es el año en el que vas a ganar el Bilbao Triathlon?
No lo sé… jaja. Los dos años que he competido en Bilbao ha sido un lujo por la prueba y la organización, y ya el hecho de poder competir después de un año lesionada y poder estar en de nuevo en esta salsa es un plus. Soy muy competitiva y voy a ir a darlo todo porque tras el año de parón estoy bien y con muchas ganas.
- Para una triatleta que procede de la natación, ¿cómo es nadar en la Ría de Bilbao?
El tema de las corrientes es muy importante. Las dos veces que he competido en Bilbao me he puesto detrás de Berasategui para aprovechar su conocimiento de la Ría. Creo que hay que ir por la esquina y volver más por el centro, pero despende mucho de las corrientes que pueda haber ese día.
- El sector de bicicleta es duro, con una doble subida al Vivero...
En 2012 anduve bien en Bilbao y en Zarautz, con un trazado de bici montañoso, pero luego llegó también Vitoria e hice un parcial súper bueno pese a que era muy llano, así que creo que me adaptaré bien. El caso es entrenar y al final se acaban recogiendo los frutos. Este tengo en el calendario pruebas como Bilbao, Zarautz o Alpe d'Huez, que son muy cañeras en la bicicleta.
- Nos consta que en el Tolosaldeko Triatloi Taldea apuestan por un doblete de Gaztañaga y Agirresarobe en la meta del Arenal ¿Cómo le ves?
¡Yo lo firmo ahora mismo! Jaja. El año pasado vi la carrera en la tele y fue súper bonita y emocionante hasta el final porque sabíamos que Gómez Cubero venía por detrás de Aimar corriendo muy bien. La climatología hizo la carrera muy dura, pero tiene su parte positiva porque si te sale una buena carrera el recuerdo lo guardas aún con más cariño.
- ¿Con qué imagen te quedas del Bilbao Triathlon?
Me quedo con dos momentos. Por un lado con la Ría porque cuando vas nadando y miras hacia arriba ves los puentes llenos de gente y es increíble, pero también con el circuito a pie y poder pasar por lugares como la araña del Guggenheim, o el Euskalduna es muy bonito. Me quedo con el espectáculo que hay de tanta gente viendo la prueba.
- Empezaste de pequeña compitiendo en natación, pero has marcado buenos tiempos en bici y a pie ¿Cuál es tu sector preferido?
En el agua es donde me siento más cómoda, pero también es cierto que es el que menos entreno porque con el ajetreo de familia, trabajo y competición, tengo las horas que tengo para entrenar y al final siempre le acabo quitando tiempo a la natación. El día no me da, y ya que vengo de la natación.... aunque creo que en líneas generales soy bastante regular.
- ¿Cómo organizas los entrenamientos para poder compaginar vida familiar, laboral y deportiva?
Llevo tres años entrenando con Jon Aranburu. Al principio hacíamos la planificación mensual pero el día a día nos llevaba a hacer mil modificaciones, y ahora funciono por semanas. También hay días de mala leche porque no he podido entrenar todo lo que debía pero cuento con una familia que siempre está dispuesta a ayudar. Como dicen los de mi equipo, es como jugar al tetris: ver las horas libres que tengo y cómo voy encajando todo.
- Pese a esas dificultades, has conseguido un gran palmarés ¿Alguna vez pensaste en alcanzar estos logros?
Para nada. Empecé como un hobby y a medida que veía que me gustaba le fui metiendo más horas de entrenamiento. Siempre he sido muy competitiva… y al final se ha convertido en un modo de vida.
- ¿Qué es lo que te ha enganchado a este deporte?
Yo hacía natación de pequeña (campeona de España) y después de haberlo dejado, empecé a coger la bici, a correr… y me gustó. Lo que te engancha es que no es como preparar una maratón, que tienes que entrenar siempre corriendo, sino que vas cambiando de actividad, y el día de la carrera también es muy vistoso. El triatlón te puede enganchar por muchas cosas.