Ese auge de nuestros púgiles servía de acicate para la afición de Bilbao a las 16 cuerdas y la verdad es que bien se puede decir que nadie salió defraudado de la cita. Hubo de todo en la tarde-noche del viernes.
Dos combates de cadetes y uno de jóvenes dieron inicio a la velada. Puro futuro para ser auscultado de primera mano por los ojos de la cátedra. En féminas, pelea igualada y con alternativas entre Nekane Alonso y Eneritz Borinaga en la que la primera se alzó con el oro.
En el peso gallo se produjo una de las sorpresas de la noche, ya que un serio y eficaz Carlos Mario Ospina se impuso al favorito Alvaro Tierno. Mientras que el gran prospecto, el aclamado Jon Fernández, con solo 18 años, logró que la distancia del pleito que le enfrentaba con el combativo Peio Etxebarria discurriera en la larga distancia que más le convenía. Así se alzó con el triunfo y con el trofeo a mejor boxeador de la noche.
El welter-ligero ofreció espectáculo con Diego Valtierra buscando manos duras y la media distancia e Ibon Larrinaga tratando de imponer el ritmo frenético que le caracteriza. Ganó Larrinaga, en tanto que en la del welter hubo una de las batallas de la velada: Artem Sukhanov al ataque desde el centro del ring, el zurdo Siles a la contra. Un combate intenso que se decidió por KOT a favor de Sukhanov.
En los superpesados Ieltxu Lahuerta y Sergio Maroto pusieron un inesperado broche a la velada de los campeonatos de Bizkaia. El primero venció sorprendentemente por KO en el segundo asalto a Maroto.
En resumen, alegría y satisfacción en vestuario MampoGym-Euskobox tras los campeonatos, por lo que Txutxi del valle recibió la distinción a
mejor club de Bizkaia en 2014 por los cuatro oros ganados. La única mala noticia fue la lesión que impidió a David Larrinaga, vigente subcampeón de España, defender su txapela del semipesado.