El Sestao River se sacudió la presión de las últimas derrotas en Las Llanas al noquear con cierta suficiencia (3-2) al talento del filial de Las Palmas, que apretó al final y que se quedó con 8 hombres en el descuento al pecar de entradas a destiempo fruto de la desesperación. Jito Silvestre, en dos ocasiones, y Yacine fueron los goleadores verdinegros, que cierra el 2014 como empezó, imponiendo su ley.
El equipo de la Margen Izquierda, que estrenó la matinal de Las Llanas en un ambiente propicio de fútbol se hizo acreedor a la victoria a base de fe y empuje, con un empalme de Yacine a centro de Riki para abrir boca y subsanando un empate del equipo canario en una jugada de lujo de su estremo Artiles, que robaba un balón en la medular, se iba por piernas de su par, salvaba el cruce desesperado de Jaio y batía con una clas einfinita la salida de Raúl Domínguez. Pero a los 27 minutos caída en el área de Khous y Jito Silvestre, sin nervios y por el centro de la portería ponía el 2-1 en el tanteador.
El arranque de la segunda parte fue letal. El River salió a tumba abierta para sentenciar el choque por la vía rápida y atornillando a la juventud de un rival asombrado por el empuje local. Jito volvía a marcar con clase, batiendo a Martín. Riki, Khous de nuevo y Rahmani, solo ante el arquero insular no cerraban el encuentro en los mejores minutos del equipo de Viadero en casa, aunque el técnico cántabro maldecía esta impericia de cara al gol. Borja, recién incorporado, ponía la emoción en el 82 y casi empataba dos minutos después, menos mal que Raúl se sacaba de la chistera una mano prodigiosa. A partir de ahí, con instantes de desgobierno y la grada de Las Llanas volcánica, desfilaron al vestuario Óscar, por una fea entrada a Ramanhi, y ya con el pitido del árbitro también era expulsado, por decirle alguna lindeza al colegiado, Stepfano.