Eibartarra, aunque afincado en Donostia, Álex Iriondo puede alardear de su pasado en Zubieta hasta el filial de la Real Sociedad, y ahora en el Barakaldo ganándose minutos como mediocentro. En apenas siete días se va a medir a sus ex compañeros del filial txuri urdin y del Real Unión: "Ahora son rivales", matiza con su gen competitivo.
“Jugué toda la vida en la Real y los últimos dos años en el Real Unión”, se presenta Iriondo, que encima se mide este fin de semana ante su ex equipo en Lasesarre: “Prácticamente los he tenido a todos de compañeros y nos encontraremos”, narra sobre los fronterizos. Apenas ha habido tiempo para vaciles, por aquello del partido entre semana de hace siete días: “Nos hemos concentrado en los anteriores, como el reencuentro con los de la Real, pero ahora son rivales”, lanza el mediocentro guipuzcoano, que jugó como cedido también en el Oiartzun y Lagun Onak.
Todos los días viene a entrenar desde Donosti hasta Barakaldo, con escalas en Castro si es necesario, junto al arquero Jon Txusta: “También suele venir Juaristi, que le recogemos en Eibar”. Iriondo se ha topado con un vestuario espléndido en el Barakaldo: “Es joven, conectamos mucho y eso se plasma en el verde, todo es positivo”, destaca. No oculta su esperanza de jugar en Primera, a sus todavía 22 años y mucho terreno para expresarse: “Ojalá se pueda dar, hay que ir poco a poco y hasta ahora se van dando pasitos”, lanza un enamorado de la “claridad de juego” de Xabi Alonso y de Zidane, su “ídolo de pequeño”.