Tras consumirse 23 jornadas de Liga de la Segunda División del fútbol sala femenino, el Bilbo FS, sólido líder de su grupo, sólo ha doblado la rodilla en una ocasión durante esta temporada. Fue en la undécima jornada, el 8 de diciembre del año pasado, cuando las rojillas cayeron en la pista del Txantrea por 3-1.
Después de toda una vuelta sin perder, las bilbaínas vuelven a encontrarse este domingo (12.00 horas en San Ignacio) con el único club de su grupo que ha logrado superarlas. La venganza está servida. El Bilbo comparece en este exigente choque con 64 puntos, por los 48 de un Txantrea que es quinto en la tabla con 15 victorias, 3 empates y 6 derrotas, con un partido más jugado que las de José Andrés Muñoz.
"Nuestro objetivo es quedar primeras de grupo con la mayor cantidad posible de puntos. Eso es lo que tenemos en mente porque la temporada está yendo muy bien", afirma José Andrés Muñoz.
El técnico del Bilbo reconoce que la derrota en la pista del Txantrea "nos hizo daño" y asegura que su equipo "tiene ganas de revancha porque se vio superior en aquel encuentro. "Nosotras estuvimos desafortunadas allí y ellas se aprovecharon de esa situación", recuerda.
La fortaleza del club navarro reside en su gran defensa, siendo el equipo de los cuatro grupos de la categoría que menos tantos recibe (27).
"Le cuesta hacer goles, ya que su forma de jugar se basa en la efectividad desde su defensa. Su forma de defender es muy efectiva y tienen una gran portera. Son muy intensas, pero no suelen hacer muchas ocasiones", analiza.
El último resultado de Valladolid "ha sido muy importante", señala José Andrés Muñoz, que pide a sus jugadoras un "esfuerzo ante el Txantrea". "Luego restarían otros 12 puntos en juego", apunta el técnico del Bilbo, que tiene 10 puntos de ventaja respecto a sus dos perseguidores, el Valdetires Ferrol y el Cidade As Burgas.