La Behobia-San Sebastián 2019 está alerta, pero no en peligro. La incapacidad de los políticos para formar Gobierno ha provocado que haya que volver a las urnas el próximo día 10 de noviembre, por segunda vez en menos de un año. Una fecha que estaba grabada a fuego en la mente de todos los corredores desde el año pasado. Fecha que ahora, por temas ajenos al deporte, se encuentra entre algodones.
Los antecedentes, teóricamente, invitan a pensar que por motivos de seguridad estos dos grandes eventos son incompatibles. De hecho, sin ir más lejos, el pasado Maratón de Madrid tuvo que adelantar su prueba en abril para que se pudieran celebrar las elecciones generales del 28-A. En este caso, la organización de la carrera y el Ayuntamiento llegaron al acuerdo de adelantar la competición. ¿Motivo? Porque, desde el área de Seguridad y Emergencias, no veían viable compaginar el evento deportivo y el derecho al voto.
En la edición de 2018, la Behobia acogió a un total de 30.775 atletas, sin contar todos los familiares, amigos y turistas que se acercan hasta San Sebastián para seguir de cerca los detalles de la carrera. Una masa social muy elevada que deberá estar protegida por los agentes de seguridad para que nadie sufra ningún altercado o problema durante el fin de semana.
Además de todo esto, el Gobierno debe garantizar una protección adecuada en cada colegio electoral y alrededores. Pero parece ser que no va a haber problema para llegar a todo. Aunque sea tirando también de voluntarios.
La organización de la Behobia, por su parte, ha emitido un comunicado en el que deja claro que "en primer lugar no existe ninguna ley que prohíba la celebración de la carrera en jornada electoral".
También afirma que en el supuesto de coincidir oficialmente con las elecciones generales ya están "trabajando con las autoridades locales de los diferentes municipios del recorrido para que la celebración de la carrera interfiera lo menos posible y en ningún caso impida el acceso a los colegios electorales cercanos al circuito".